¿De que serviría enfadarte con el vecino, si dos horas después tuvieras la visita de la muerte?, ¿Tendría algún objeto mantener sentimientos de rencor hacia tu hermano, si ese mismo día dejaras de existir?, ¿Cuán importante sería pisar a tu compañero de trabajo para conseguir un ascenso, si al día siguiente ya no fueras a trabajar por haber muerto?, ¿Cómo te gustaría dejar este mundo?, ¿Sabiendo que has hecho felices a tus seres queridos, o con el regusto amargo de haberte pasado las últimas horas de tu vida criticando cualquier acción de tu familia?, ¿Cómo te gustaría que te recordaran?, ¿Como la persona que ayudó a los demás cada vez que se presentaba una oportunidad, o como el egoísta que no sólo no prestaba ningún tipo de apoyo, sino que además, se apropiaba de todo lo que pudiera favorecerle aunque perjudicara a sus hermanos?
Reflexiona durante un momento………….. Imagínate que mañana no verás el nuevo día, ¿cómo te gustaría despedirte? ¿Te gustaría que dijeran eso tan manido de “tanta paz lleve como paz deja”? No, no somos lúgubres ni tétricos, puede pasar, de lo único que podemos estar seguros es de que vamos a morir. No sabrás lo que vas a comer mañana, ni cómo será el hotel de tus vacaciones, pero puedes estar seguro/a de que un día vas a dejar de existir en tu cuerpo físico. ¿Por qué no mañana?, ¿Alguien te ha dicho que será dentro de diez, veinte o cincuenta años?
Reflexiona……….., reflexiona……….., reflexiona si merece la pena la vida que llevas de críticas, de enfados, de rencores, de tristeza, de silencios, reflexiona………
¿Qué pasaría si supieras la fecha de tu muerte y esta estuviera próxima?, ¿No te gustaría que tus compañeros de trabajo, al ver tu asiento vacío, les inundara un sentimiento de amor y lealtad por lo mucho que has hecho por ellos?, ¿No te sentirías feliz porque cada persona con la que has tenido contacto te recordara por tu amabilidad, por tu sencillez, por tu colaboración, por tu alegría?, ¿No les harías saber a los tuyos lo mucho que les quieres, lo feliz que te han hecho, cuanto han hecho por ti?
¡Pues hazlo!, Cuando te levantes de la silla después de leer esto empieza a actuar como si mañana fuera tu último día en la Tierra: No critiques, ¿de qué sirve?, y además no serás criticado/a; no juzgues, ¿de qué sirve?, y además no serás juzgado; expresa tu amor a todos, ayudando, apoyando, colaborando, todos son tus hermanos, y lo verás más claro cuando dejes el cuerpo y veas tu conexión con todo y con todos. Sin cuerpo ni hay razas, no hay sexo, no hay ideologías, no hay creencias, Pero sobre todo expresa tu amor a los tuyos: que no pase ni un solo día sin decirles “Te quiero”, que no pase ni un día más sin pedir perdón por tu comportamiento crítico, que no pase ni un segundo más por tu ¿maltrato emocional?
Así llegarás al último día de tu vida alegre, feliz, en paz y lleno/a de amor. Así la energía que te llegue el día que te vayas será amor puro, y te ayudará a seguir creciendo allá donde vayas.
Actúa cada día como si fuera el último. No lo dejes para mañana, puede ser tarde, muy tarde, puede ser que ya no estés.