¿Qué es la vida? Un frenesí.
¿Qué es la vida? Una ilusión, una sombra, una ficción;
y el mayor bien es pequeño;
que toda la vida es sueño, y los sueños, sueños son.
Una vez que
llegamos a la materia en el cuerpo físico, se nos acaba la paz, el amor y la
felicidad que tenemos al otro lado de la vida. Es como si nos envolviera una
tela que nos impidiera ver y sentir de dónde venimos, hasta el extremos de olvidarnos
completamente del que es nuestro hogar, y nos sentimos atrapados y aislados,
inmersos, de nuevo, en la ilusión, en la sombra, en la ficción y en el sueño
que escribía Calderón de la Barca.
Nuestra
conciencia, a lo largo de los siglos ha caído a un nivel tan bajo que somos
incapaces de reconocernos como seres divinos, y nos hemos separado tanto de
Dios que para nosotros es un desconocido que, parece ser que premia a los
buenos y castiga a los malos, según nos enseñan las religiones, y sus
dirigentes que son, según ellos mismos, sus representantes en la Tierra.
Pero es
posible, que este nivel tan ínfimo de conciencia, este no reconocernos como
hijos de Dios, el desconocimiento que tenemos del alma, la distancia kilométrica
que existe desde nuestra conciencia al corazón, y el aislamiento de Dios, esté
comenzando a cambiar, poco a poco, es cierto, pero algo está cambiando.
Tanto
sufrimiento como hemos padecido en las miles de vidas que llevamos sobre la
Tierra, nos está convirtiendo, lentamente, en almas fuertes y valientes, nos estamos
alineando con la Voluntad de Dios, estamos aprendiendo a rendirnos o a aceptar
nuestra vida, estamos aprendiendo a confiar y a desprendernos del miedo.
Ya hay almas
que están en el umbral de la prueba definitiva, la prueba de permitirse confiar
en Dios, y acortar la separación que existe entre nosotros y Dios. Cuando eso
ocurra, Dios nos “proveerá” de todo lo necesario, se acabarán entonces, los
dolores, las carencias y las miserias.
Todos los
seres humanos estamos aprisionados en las mismas trampas, en las mismas
ilusiones, en los mismos miedos, en los mismos problemas, en los mismos
pensamientos. Pero cuando salgamos de esta rueda nada nos será negado y
convertiremos el valle de lagrimas de la Tierra en el valle de amor y paz que
ya disfrutamos cuando estamos al otro lado de la vida.
Aunque
parece que Dios nos está poniendo a prueba de manera permanente, no es tal, Dios
nunca nos ha puesto a prueba, ni antes, ni ahora, ni mañana; porque Dios es
amor y Su amor es incondicional. Cuando nos abramos a Dios, el Universo
proveerá todas las situaciones y oportunidades para equilibrar nuestras
deficiencias, para despejar cualquier problema, para resolver todas nuestras
cuestiones y curarlas para siempre. Podremos descubrir, entonces, con qué
rapidez responde el Universo a nuestras peticiones cuando nos hallamos
alineados con la Voluntad Divina.
La apertura a la voluntad de Dios se
realiza a través de la rendición.
Os dejo algunas frases de libro “Los
hijos de Dios” de Christine Mercer, que habla de la aceptación y de la
gratitud:
·
"¡Yo prometo que nunca más me quejaré!, e iluminaré
la oscuridad con AMOR."
·
“Ser agradecido por todas las cosas, (todo lo que venga)"
·
“Cualquier sufrimiento, cualquier dolor, decepción,
aflicción, o incluso miedo, cuando se acepta con la verdadera oración de:
"Hágase Tu Voluntad" puede ser instantáneamente transmutado en poder
ilimitado."
·
"Aquí y allí, sentado en el banco de un parque,
en un coche en la calle, en un edificio tranquilo, o caminando por una calle
llena de gente, o por una calle solitaria, se puede dar una sonrisa, decir una
palabra, o un pequeño movimiento con la cabeza de aprecio comunicado sin
palabras. Invisibles rayos de gloria viva, enviados en un pensamiento bondadoso
de infinito amor, pueden fortificar al prójimo con renovado coraje y más
energía."
·
“Fue entonces cuando entendí el dolor, el sufrimiento
y la tristeza que rompe el corazón, en su verdadera luz. No como un castigo de
Dios, sino como bendiciones, ya que en ellos están contenidas las llaves del
progreso, Luz, fuerza y completo dominio. En sí mismos, eran justo lo que
aparentaban ser, cargas insoportables, pero cuando se aceptan y se recubren en
la fe y el amor del hombre, pueden ser transmutadas en completa gloria eterna.
El hombre tiene verdadero dominio sobre ellos, si lo usa. Ellos (el dolor, el
sufrimiento y la tristeza) contienen el poder para poder cambiar la oscuridad
en luz, la pobreza en abundancia, la tristeza en éxtasis, el dolor en alegría.
En el hombre están las llaves y el poder y el dominio para mandar sobre ellos
(el dolor, el sufrimiento y la tristeza), para amansarlos y para glorificarlos.
O para ser destruido por ellos."
·
“No busques conocer a Dios a través de iglesias,
hombres o líderes, sino busca a Dios a través de tu propio corazón y a través
de tus propias actitudes divinas, cumple Sus promesas sagradas. Perfecciona
estas actitudes sagradas y tú serás disuelto y te convertirás en esto que tú
interpretas. Busca convertirte en amor en toda su misericordia compasiva,
divina, benévola, Crística, y conocerás los misterios de la Divinidad, o el
gran misterio y poder de convertirte Divino."