Mi alma, mis libros, mis creencias, mi corazón y mis opiniones.
El viaje del alma
El alma no tiene raza, no tiene religión, solo conoce el Amor y la Compasión. Todos somos seres divinos, hace miles de años que lo sabemos, pero nos hemos olvidado y, para volver a casa tenemos que recordar el camino. BRIAN WEISS
Me he encontrado con
muchísimas personas que me han dicho: “Es que no se meditar”. Y mi respuesta
siempre es la misma: “Todo el mundo sabe meditar”. Decir que no se sabe meditar
es como decir que no se sabe dormir, y que le enseñen a dormir. Nadie le enseña
a dormir, dormir es una necesidad del cuerpo. Meditar es una necesidad del
alma.
Meditar es la cesación
del pensamiento, y el pensamiento puede cesar estando sentado, de pie,
acostado, apoyando la espalda en la pared o manteniéndola recta. Puede cesar
tocándose las yemas de unos dedos, de otros, o de ninguno. Puede cesar vestidos
de blanco y de negro, en la madrugada y en la noche, con la cabeza erguida o
inclinada. Lo importante es que cese el pensamiento, cualquier pensamiento,
hasta los pensamientos inducidos de repetición de palabras, por cánticos más o
menos espirituales, o por la repetición de “un cuento” que va contando un guía
de meditación.
La meditación lo que
busca es el silencio, es el vacío, es la nada, y eso es imposible de enseñar.
Todo lo que enseñamos
quienes nos dedicamos a estos menesteres, está bien, puede ayudar en un
principio, pero no estamos enseñando meditación, porque la meditación no se
enseña, llega por sí sola. Enseñamos técnicas de concentración, de imaginación,
de contemplación, de visualización, de respiración, y algún “ción” más.
Nunca
estoy solo. Dios está conmigo. Él cuida de mí. Él sana mi cuerpo. Él administra
mis finanzas. Él ocupa mi pensamiento. Él dirige mis emociones. Él me llena con
su Amor.
Todo lo que sucede en mi vida lo he
planificado conjuntamente con Él. Todo es perfecto, absolutamente todo. Por lo
tanto, no hay miedo, no hay preocupación, no hay sufrimiento, no hay dolor.
Todo es perfecto, todo está bien.
Por cierto, Dios también está
contigo. Aunque no quieras, está contigo. Aunque no lo creas, está contigo. Pero
si quieres sentirlo sólo tienes que mantenerle en tu pensamiento. Deja salir a
los demonios que ocupan habitualmente tu mente. Deja salir el miedo, la
carencia, la culpa, la ira, los celos, la rabia, la envidia, la preocupación,
la impotencia, y ocupa ese espacio que dejas vacío con Dios.
La vida no es como a
cada uno de nosotros nos gustaría que fuera.
La vida es, y punto, y querer
que sea según los propios deseos, o los propios caprichos, es como querer
retorcerla.
Y retorcer a la vida,
es el camino más corto para el sufrimiento.
Si
algo no te gusta de tu vida, trabaja para cambiarlo, pero no condiciones tu
felicidad a los cambios que esperas conseguir.
Nunca
dejes de decir “Te amo”. No sabes si será la última vez. Cada día, a cada
instante, expresa tu amor.
Cuando la relación del
hombre con el hombre, sea idéntica a la relación de Dios con el hombre,
habremos encontrado el cielo en la tierra.
Y
la gloria, la felicidad, la alegría y el amor, serán las armas de los
ejércitos, la voz de los poderosos, el libro sagrado de las iglesias y la
moneda de cambio del capital.
Vivir sin miedo.
Sin miedo a la gente,
porque todos están embarcados en el mismo barco, viviendo todos, las mismas
miserias, deseando imposibles, tratando de aparentar lo que no son.
Sin miedo a la vida,
porque es hermosa, porque el timonel de la vida es uno mismo, porque el miedo
merma la propia confianza, y hace embarrancar a la vida, en los lodos de la
crítica, de la ira, del resentimiento.
Sin miedo a la
libertad, porque el miedo aprisiona con grilletes invisibles sin permitir el
movimiento.
Sin miedo a decir “no”,
con cariño, cuando la circunstancia lo requiera, porque cuando se retienen
varios “noes” el siguiente “no” ya está exento de cariño, y es más un exabrupto
que lleva implícita la tormenta.
Sin miedo, porque con
miedo no se ama.
Con
amor, porque quien ama no teme.
Empiecen a vivir su
vida, en lugar de tratar de vivir la vida de los demás. A los otros no hay que
agradarles, lo que hay que hacer es respetarles, es ayudarles si lo necesitan
y, por supuesto, si aceptan la ayuda. No hay que criticarles, no hay que
juzgarles, ni tan siquiera opinar, si no se lo requieren. Colóquense en sus
zapatos antes de opinar, ¿Qué sabe nadie de nadie?, ¿Qué saben de sus
pensamientos, de sus emociones, del momento por el que están pasando?, ¿Que
saben de su dolor o sus alegrías? Pues nada, no saben nada, así que tampoco
saben el porqué de sus reacciones.
Dejen
caer sus máscaras y acéptense. Con la propia aceptación comenzarán a amarse, y
la consecuencia lógica de la aceptación y del amor por ustedes mismos será la
aceptación del otro y el amor hacia él.
Una
de las tareas más difíciles del ser humano es ser honesto y sincero consigo
mismo.
Qué diferente sería la
vida si en lugar de centrarse en lo negativo, que es el punto de mira de todos
los seres humanos, cambiaran el ángulo y se centraran en lo positivo.
Se
ahorrarían mucho sufrimiento inútil
La vida es un gran
escenario en el que se llevan a cabo infinidad de papeles, y todos
protagonistas.
No existen vidas
insulsas ni vidas anónimas. Cada ser es un protagonista en la vida, todas las
vidas son interesantes y con contenido.
Cada persona vive la
vida que desea vivir. Solo ella es responsable de sus éxitos o sus fracasos.
Todos los seres humanos
tenemos los mismos problemas, con ligerísimos matices.
Lo que es bueno para
uno es bueno para todos.
Si
eres capaz de ver los problemas de tu vecino, e incluso le das consejos, puedes
aplicártelos a ti mismo, seguro que te van bien en alguna faceta de la vida.
En
el Amor no hay esfuerzo, no hay dolor, no hay sufrimiento, no hay dudas, no hay
celos. En el Amor hay sinceridad, hay transparencia, hay comunicación, hay
libertad, hay alegría.
Suyana, (nombre quechua que significa
esperanza), apareció un día por la consulta para intentar rebajar su nivel de
estrés y de ansiedad.
Pero enseguida comprobamos que la
ansiedad solo era un efecto. La causa real era la imposibilidad de concretar
ninguna relación. Ninguno de los hombres con lo que iba teniendo relación querían
formalizar nada, no querían formar una familia, ya les iba bien con una
relación, llenémosle informal. Pero eso no era suficiente para Suyana.
La terapia no era suficiente, la
meditación tampoco, había algo más profundo a lo que no parecíamos tener acceso
y con permiso de Suyana, realizamos una sesión para contactar con su Maestro,
para ver si podíamos llegar a alguna información que nos permitiera trabajar
sobre seguro.
Este fue el resultado:
·¿Por
qué Suyana no formaliza ninguna relación?
-Suyana está atrayendo lo que hay en su
interior.
-Ella no cree en sí misma, por eso la
gente que se acerca a ella, no puede ir más allá.
·¿Por
qué no cree en sí misma, por algo de vidas pasadas?
-Los seres humanos bajan a la Tierra con
un equipaje.
-Una vez en la Tierra deben comenzar a
trabajar sobre ese equipaje, abrir su maleta, ver lo que sirve y ver lo que no
sirve, arreglar muchas cosas de las que no sirven, y otras, simplemente, tienen
que aprender a desecharlas.
-Suyana debe trabajar en su autoestima.
-Siempre va a atraer hombres que no
quieren ir lejos con ella, que no quieran intimar con ella, ya que ella no es
íntima consigo misma.
-Ella no se ve. Hay una parte de ella misma
que no ve. Igual que la luna: Cuando la luna está en cuarto menguante o cuarto
creciente, hay una parte de sombra, una parte que no podemos ver, sin embargo,
está ahí. Esa sombra es la que Suyana tiene que ver en sí misma.
·¿Cómo
podría hacerlo?
-Uno de los trabajos más difíciles del
ser humano es ser sincero consigo mismo.
·¿Lo
puede conseguir a través de la meditación?
-Ese tipo de trabajo se puede conseguir
a través de la meditación o a través de terapias psicológicas, pero siempre y
cuando el ser humano esté dispuesto.
-A veces el bloqueo es tan grande que no
lo llegan a ver nunca.
·Con
la terapia parece que se encuentra mejor, pero no parece definitivo. ¿Es real o
solo es como un lavado de cara?
-Ella no ve lo que hay en la sombra
todavía, por lo que cualquier trabajo que haga simplemente es maquillar la
situación, y le va dar satisfacción momentánea.
-Cuando ella entre en la sombra, en la
parte sombría de su ser, entonces, se va a sentir bien. Y una vez que, lo
comience a trabajar, el cambio irá creciendo y creciendo, y comenzará a
sentirse mejor sinceramente.
-Estas mejoras que tiene ahora son
esporádicas.
·Para
ver sus sombras, ¿Qué necesita, una catarsis?
-Para ver sus sombras primero necesita
aceptar que tiene sombras.
·Ella
sola no lo va a ver.
-Si ella busca, lo encontrará, quizás no
hoy, quizás no mañana, pero si entiende que ese es el trabajo que debe hacer y
continua la búsqueda, lo encontrará, porque está ahí, y no va a irse a ninguna
parte, porque no lo ha trabajado.
-Si tú le dices que tiene un lugar
dentro de ella que está oculto en la sombra, porque es algo que es doloroso y
difícil de trabajar para ella, y que debería sacarlo a la luz para poder
trabajarlo, y así poder ser feliz por el resto de su vida, y que la felicidad
no sea temporal, sino que sea sostenible en el tiempo, quizás le siembres la
semilla de la duda y cuando esté preparada, después de hacer su proceso,
comience a trabajar en ello.
·Si
se le pudiera decir: “Esa sombra que tienes es debido a……, a lo mejor si le
resuena dentro de ella será más fácil.
-Esta sombra, este espacio sombrío que
tiene dentro de ella, lo trae desde muy pequeña.
-Ella siempre creyó que debía hacer
cosas para agradar a los demás y, poco a poco, dejó de mostrar parte de su
esencia y fue dejando de creer en sí misma, y entonces apareció, (se creó), un
personaje para suplir esa característica que escondía de ella misma, y le fue
más fácil.
-Sin embargo, ahora está pagando las consecuencias,
porque ninguno de estos hombres con los que sale, la llenan a ella al cien por
cien, pero llenan su vacío, que por momentáneo que sea, le va bien en su
momento.
·¿Tuvo
algo que ver o incidió en eso una pareja que tuvo que se mató en un accidente?,
¿Ha sanado eso?
-Todavía se lamenta, todavía piensa que
hubiera pasado si no se hubiera matado, ¿tendría hijos?, y este hecho refuerza
en su mente la idea de que ella no vale lo suficiente para tener una pareja que
la quiera.
·¿Hay
algo que podamos saber para ayudarla o para completar su capítulo del libro?
-Escriban la enseñanza y la reflexión de
todo esto.
-Los seres humanos pasan mucho tiempo en
la Tierra buscando a alguien o algo que les llene, algo que llene sus vacíos.
Sin embargo, no buscan dentro de ustedes mismos, porque ustedes, ya son
personas llenas y completas, y lo que les hace sentir vacíos o no del todo
llenos, son partes que se esconden de sí mismos.
-Lo esconden como si con eso no
volvieran a verlo o a sentirlo nuca más. Pero todo eso comienza a hacerse
presente afuera, en el caso de Suyana, en las relaciones que no prosperan.
-Hay personas que no pueden tener hijos,
hay personas que no pueden tener amigos, hay personas que no pueden tener
pareja, y eso es porque han escondido dentro de ustedes algo que no quieren
ver. Entonces, ¿por qué les va a aparecer afuera?
-La energía va detrás del pensamiento.
Si yo creo que no valgo, ¿cómo le puedo hacer creer a otro que si valgo? Si yo
no me creo capaz, ¿cómo le puedo hacer creer a alguien de que soy capaz, de
tener una familia, de ser pleno?
-Busquen dentro de ustedes mismos.
Ustedes tienen todas las respuestas.
A
partir de aquí, el trabajo fue más fácil.
Si
existe algo en tu vida que no se concreta, que se repite una y otra vez, y no
sabes la causa, se puede, como en el caso de Suyana intentar preguntar a tu
alma o a tu Maestro.
Teniendo en cuenta que
el cuerpo ha sido elegido por cada alma, como la mejor opción, para el trabajo
a realizar, rechazar el propio cuerpo, o alguna de sus partes significa
renunciar a aquello que el alma ha preparado con esmero.
Por lo tanto, si cree
que ha venido para realizar una misión, y que, para ello, el instrumento que se
ha dado es el cuerpo, tiene que aceptar, valorar, respetar, cuidar y amar su
cuerpo.
Si no cree que ha de
realizar un trabajo determinado, es igual, tiene que pasar la vida, con su
cuerpo, con cualquiera que sea su creencia. Por lo tanto, acéptelo también, ya
que sufrirá inútilmente, si no lo hace.
Así que, tanto si cree
que ha elegido su cuerpo, como si cree que usted es el resultado del azar,
tiene el cuerpo que tiene. Acéptelo, no lo puede cambiar, salvo los pequeños, o
grandes matices de la cirugía.
Aliméntelo de manera
sana, ejercítelo, que no se atrofie antes de tiempo, dele el descanso que le
corresponde. Potencie sus fortalezas y trabaje para mejorar sus debilidades.
Recuerde que energías
iguales se atraen, por lo tanto, si usted no está satisfecho de su cuerpo, esa
energía le rodeará como un anuncio de neón, y todos aquellos que se crucen en
su camino, serán atraídos por su “luz de neón”, y opinarán, (deporte mundial el
de opinar de cuestiones ajenas), que no les gusta el cuerpo que usted tiene, (es
lo que dice su anuncio), con lo cual añade sufrimiento al suyo propio.
Tenga en cuenta,
además, que usted es un ser único. No existe otro igual en todo el Universo. Y
las piezas únicas siempre han sido muy bien valoradas.
No
se lamente de su cuerpo, no lo critique. Con los lamentos y con la crítica no
va a conseguir cambiarlo.
Los seres humanos son
seres completos, pero no se lo acaban de creer, y visto con los ojos de los
hombres, es normal que así sea, es comprensible, ya que a cualquier persona que
se le pregunte si está satisfecha con su cuerpo, con su físico, con su inteligencia
o con su suerte, va a decir que no. Siempre va a encontrar alguna falla en
ella. Y como los seres humanos son especialistas en encontrar fallas y
centrarse en ellas, se van a pasar la vida lamentándose de eso que creen que es
una falla, escondiéndola o disimulándola.
Por
eso el tratar de agradar a los demás, y la necesidad de aprobación. Necesitan
que alguien les apruebe, ya que no se aprueban ellos mismos.
Todas
las almas, en la preparación de su vida “ELIGEN”, absolutamente, todos los
accesorios que necesitan, para llevar a buen término el trabajo que han
decidido realizar en esa vida en la materia.
Los
accesorios son, unos visibles, como su cuerpo o su aspecto físico, y otros que
no se ven tanto, como puede ser su inteligencia, o las situaciones que se va
dando el alma, para la consecución de sus fines.
“Ahí está el conocimiento de los hombres. Amarse a si mismos, valorarse, respetarse, aceptarse. Pero eso
también tiene que ver con conocerse.
Muchas veces los humanos transitan
el camino sin conocerse, quejándose, quejándose siempre, y nunca se dan cuenta
de cuál es la fuente de la queja real.
Todos quieren, quieren, quieren
cosas, quieren amor, todos quieren, pero no miran hacia dentro para ver que es
lo que les falta, lo que les falta dentro, que es lo que está funcionando mal
para que no les llegue lo que creen que les falta fuera.
A “este otro lado de la vida” estamos dispuestos a
darles todo lo que quieren, pero muchas veces, lo tienen delante de sus ojos y
no lo pueden ver. Y no lo pueden ver, porque no se pueden ver a si mismos por
dentro”.
Del libro "El amor a través de tus ojos" (de Florencia Senor y Alfonso Vallejo).
Si
llego a mi destino ahora mismo, lo aceptaré con alegría,
y
si no llego hasta que transcurran diez millones de años,
esperaré
alegremente también.
Walt Whitman
Quiero
hacer un pequeño apunte sobre la aceptación, o no tan pequeño, porque ahora
mismo no sé cuántas entradas contendrá: ¿Qué es?, ¿para qué sirve?, y ¿cómo
conseguir aceptar la propia vida?
Pero antes permitirme una
introducción de porqué la aceptación, y no la felicidad, o el amor, o como
conseguir dinero.
Desde
donde alcanza mi conciencia, siempre he sentido mucha curiosidad y una especial
atracción, por todo lo que pudiera haber al otro lado de la vida. Creo que de
bien jovencito ya me hice las preguntas del millón, ¿quién soy?, ¿de dónde
vengo?, ¿adónde voy?, ¿para qué estoy aquí?
Como en la vida física todo es
cuestión de creencias, siempre he creído, nunca he dudado, de que, al otro
lado, antes de nacer y después de morir, hay una vida mucho más placentera que
esto que nos damos en la materia.
Esta curiosidad y esta atracción,
han hecho que busque información de todo tipo, lo que cuentan psíquicos, los
que describen los que han estado clínicamente muertos durante un periodo de
tiempo, libros de regresiones, en fin, un poco de todo, que ha hecho que aún se
afiance más en mi la creencia de que es ahora cuando estamos realmente muertos
y que, nuestro verdadero nacimiento es cuando dejamos el cuerpo.
¡Energías iguales se atraen! Lo
expresa muy bien el refrán: “Dios los cría y ellos se juntan”. Pues en esa
atracción que realiza mi energía hacia energías similares, me he ido
encontrando con personas, que tenían cierta facilidad para contactar con
energías del otro lado de la vida, médiums, clarividentes, clariaudientes,
adivinos, psíquicos, un poco de todo.
Bien es cierto, que la mayoría de
ellos no controlaban muy bien su poder y, además, no discernían muy bien con
quien contactaban, y expresaban lo que les contaba cualquier charlatán, que también
existen al otro lado de la vida, porque al otro lado de la vida hay de todo,
como en botica.
Para saber si realmente eran
charlatanes, solo había que preguntar cuestiones de futuro. Si respondían, estaba
claro, no eran muy importantes, eran “mindundis” y, rápidamente aparecía en mi
mente: “Te pillé, charlatán”. En ese momento sabía que tenía que dejar de
escuchar, porque el futuro de cada uno, no lo sabe nadie, ya que es la propia
persona la que decide hoy cuál será su futuro de mañana, con sus pensamientos,
con sus palabras y con sus acciones. Se llama libre albedrio, y nadie sabe
hacia dónde va a dirigir sus pasos cada persona.
Si, ya sé que alguien puede decir:
“pues a mí me han adivinado muchas cosas”. Pero seguro que son menos que las
que no te han adivinado. Hay que tener en cuenta, como decía anteriormente, que
energías iguales se atraen. Cuando pronostican algo que realmente queremos,
ponemos tanta energía en que se consiga, que al final se consigue. Es la ley de
la atracción.
En fin, cuando yo llegaba a ese
punto, ya sabía que tenía que creer, un máximo de dos sobre diez, o darme la
vuelta y marchar. Me ha pasado unas cuantas veces.
Y no escarmiento, porque me ha
vuelto a pasar. Pero esta vez parece diferente. Jamás hablan de futuro, jamás
pronostican, jamás dan una respuesta que pueda condicionar, solo dicen aquello
que puede ayudar a la persona, pero no a conseguir dinero, o un trabajo o una
pareja, sino aquello que la puede ayudar a liberarse del dolor y del
sufrimiento, o aquello que la puede ayudar a entender la razón de lo que está
sucediendo en su vida.
Con esa persona estamos utilizando
su “don”, para intentar ayudar a los que desean ser ayudados, porque
sorprendentemente, hay muchas personas que prefieren seguir en su proceso de sufrimiento,
sin realizar ningún cambio. Es su libre albedrío.
En todas las sesiones hay un
mensaje, o una receta, que se repite: Aceptación y amor.
Por eso estas entradas sobra la
aceptación. Los seres humanos no aceptan, en muchos aspectos sus vidas, pero
tampoco hacen nada por cambiarlas. Solo quiero plantar la semilla de la duda y
después, ¡a ver que pasa!
¿Realmente amas a tu familia, hijos,
pareja, padres, hermanos?, ¿siempre?, ¿no dejas de amarles ni un ratito?
Y ¿Qué crees que sucede cuando les
gritas?, ¿les sigues amando entonces?, ¿crees que Dios te ama?, ¿te grita? En
cada grito se pierde un gramo de amor.
¿Sigues amándoles cuando les criticas?,
¿sientes la crítica de Dios en algún momento? En cada crítica se pierde otro
gramo de amor.
¿Sigues amándoles cuando les ocultas
algo, porque te avergüenza que lo sepan? En cada engaño se pierde un kilo de
amor.
Seguro que a pesar de todo esto les
amas. Aunque ten cuidado, no se te vaya a acabar el amor de no usarlo.
Sabemos que no es el mismo Amor con
el que Dios te Ama, pero para ser un aprendiz del Amor, ¡está bien!
Pero lo que no está tan bien, es que
este principio de amor, que para ti un día fue ¡él no va más!, lo dilapides por…,
¿tonterías?
Porque, ¿no es una tontería discutir
por lavar unos platos, por sacar una bolsa de basura a la calle, por no poder
ver un partido de fútbol, por no contestar cuando te llaman, por no echar la
ropa sucia en el lugar asignado, por…, por…, por…?
Reflexiona por un instante………. Si no
has discutido, juzgado, criticado, enojado, gritado, o molestado por alguna de
estas cosas, o nimiedades parecidas, ¡felicidades!, eres un ser excepcional.
Pero lo normal es que sí te haya ocurrido algo parecido.
Si te ha ocurrido, siéntate en
silencio, cierra los ojos, ponte en contacto con tu respiración y recuerda…:
Recuerda
que tus papás, para ti, eran Dios hasta que llegaste a la adolescencia.
Recuerda
que tu pareja era tu alma gemela, que hacía que en lugar de alimentarte tú,
tuvieras que alimentar las maripositas que vivían en tu estómago.
Recuerda
como lloraste de amor el día que nació tu hijo o tu hija, (yo es que soy un
llorón), o si no llegaste a llorar, recuerda tu sentimiento.
Si Dios, que tiene muchas más
razones para enojarse contigo, no lo hace, ¿por qué lo haces tú?, ¿seguro que
amas a los tuyos?
Antes de juzgarles, ponte en su
lugar. Antes de criticarles, ponte en su lugar. Antes de engañarles, ponte en
su lugar. Antes de lanzarles una palabra ofensiva, ponte en su lugar. Antes de
negarles la palabra, ponte en su lugar.
Si estás leyendo esto, tú puedes
hacerlo, No dilapides tu amor, ¡úsalo!, que no se acabe por la falta de uso.