Luz,
vivía una vida de estrés, y solicitó cita para una terapia. Después de la
terapia, la receté veinte minutos diarios de meditación, que no siguió al pie
de la letra, sino que, saltándose la receta, llegaba a meditar cada día, no
menos de hora y media. Me decía que se lo pedía el cuerpo y el alma.
Y como ella misma explica en el
libro que estamos escribiendo: “Casi de
inmediato dejé las pastillas para dormir, las migrañas cesaron por completo, el
cardiólogo me bajo la dosis de la pastilla para el corazón, de 100mg a 1,25mg,
el bruxismo desapareció, el colon irritable solo aparecía en escasas ocasiones
y así con cada dolencia causada por el estrés”.
Después de cinco terapias, y antes
de darle el alta, quiso hacer una regresión.
En
esa regresión primero, y en sus meditaciones posteriores después, descubrimos
un “don” en ella, que hasta entonces permanecía oculto: “Es médium”. Puede
contactar con las almas al otro lado de la vida. Con almas de personas vivas,
con almas de personas que han dejado su cuerpo, con Maestros Ascendidos, con
Ángeles y con Arcángeles. Puede viajar por otras vidas, no solo suyas, sino
también por las vidas anteriores de cualquier persona.
Después
de un poco de práctica, los Maestros, (Jesús, María, Buda, Djwhal Khul,
Kuthumi, etc.), comenzaron a dar, en un principio pinceladas de mensajes, que
con el tiempo fueron haciéndose más que pinceladas. Nos han hablado del Amor,
de la aceptación, del perdón, de la bendición, etc.
Así
supimos que su “don” es una herramienta para ayudar a las personas a completar
el trabajo para el que decidieron nacer, a encontrar también, “su camino de
vuelta a casa”, y sobre todo para encontrar los vehículos en los que tienen que
recorrer ese camino: La Aceptación y el Amor. Pero, en ningún caso, es una herramienta para la adivinación, porque ni
Ellos mismos saben lo que va a suceder. Es la persona, quien haciendo uso de su
libre albedrío, determina su futuro.
Como
sanador, con veinte años de experiencia, en sanación y regresiones, tengo que
reconocer, por desagradables experiencias anteriores, que nos costó un poco, bueno,
un poco bastante, de creer y asimilar lo que estaba ocurriendo. Al final no nos
quedó más remedio que creer, nos tuvimos que rendir a la evidencia.
Ahora
estamos trabajando conjuntamente, siguiendo las pautas recibidas de los
Maestros, de escribir un libro para explicar la razón de muchos de los
“porqués” que se hacen la mayoría de los seres humanos: ¿Por qué no tengo
pareja?, ¿por qué mi hijo ha nacido con esta disfunción?, ¿por qué siempre me
encuentro con el mismo tipo de personas?, ¿por qué a mí Señor?, etc., etc.,
etc.
El
libro está muy encaminado, y hemos
recibido autorización, para abrir la conexión con las almas a todas aquellas
personas que tengan un “porqué” en su vida, al que no sepan o no se atrevan a
responder, y tengan curiosidad por conocer la respuesta a ese por qué.
(Bueno, en realidad la respuesta la saben, porque está en su corazón, pero por
si no han conectado con su interior, o necesitan confirmación, estamos a su
disposición).
Lo estamos haciendo de
la siguiente manera. La persona nos envía las preguntas vía mail, (estamos en
Lima-Perú), y nosotros enviamos las respuestas por el mismo medio. Como seguro
que las respuestas originan nuevas repreguntas, nos vuelven a enviar las nuevas
preguntas. Tanto las primeras preguntas como las que surjan con posterioridad estarán todas incluidas en los 100 $, que es el coste de la consulta.
Como
trabajamos vía e-mail, pueden contactar con nosotros desde cualquier parte del
mundo.
Para
que se hagan una idea de que se van a encontrar, les transcribo un esbozo de
uno de los capítulos del libro que les comentaba en un párrafo anterior. Son dos
de las conversaciones, (literal, sin retoques), mantenidas con el alma de
Alessia Coppola, (una paciente), y con el Maestro de Alessia. (Aunque hemos
comprobado que puede aparecer cualquier Maestro, porque Todos saben todo de
todos).
Alessia
tiene 32 años. Es una mujer hermosa, pero según ella le sobran quince kilos. Es
alegre, dispuesta, ayuda a sus amigos, es tierna, dulce y amorosa. Pero…, no
tiene pareja y ella quisiera tener, porque ella misma dice, se le está pasando
la edad.
Alessia Coppola
El conocimiento de uno mismo
Estoy con el alma de Alessia.
¿Te
gustaría tener pareja Alessia?
Si. Si quiero tener pareja.
¿Estás
haciendo algo para tenerla?
Creo que si, pero no mucho.
¿Por
qué no mucho?
Porque me doy por vencida.
Pero
eres casi una niña todavía. ¿Sabes por qué no tienes?
No.
(Luz dice que siente como vergüenza, timidez, pero ella no le dice nada).
Gracias
Alessia.
Creo
que nos iría bien hablar con su Maestro.
Ya.
¿Cuál
es la razón por la que Alessia no tiene pareja?
No tengo respuesta.
¿Está
contemplado en el Plan de Vida de Alessia?
Estamos haciendo la pregunta
equivocada.
¿Cuál
es la pregunta correcta?, ¿Qué tiene que aprender Alessia en esta soledad?
Esa
es la pregunta correcta.
Alessia
debe aprender a conocerse para poder saber que es lo que quiere.
Ahora
todos le parecen buenos candidatos, todos le parecen posibles, porque todos
tienen buenas características, pero ella todavía no sabe lo que quiere, no se
conoce a si misma lo suficiente, como para poder elegir con quien pasar el
resto de su vida.
Hay
mucha buena gente en el mundo y no por eso todos tienen que ser su pareja.
¿Cómo
puede una persona, como Alessia, llegar a conocerse a si misma?
Trabajando en si misma.
Trabajando
¿Cómo?
Hay
muchas formas de aprender a conocerse a sí mismos. Los primeros guías son sus
padres, si en algún momento pierden el rumbo, hay terapeutas que les pueden
ayudar, y siempre está el camino de Dios, que también les va a ayudar al
autoconocimiento.
Si
una persona como Alessia pide ayuda y le indican el camino que tiene que
recorrer, y no lo recorre, ¿qué?
Es su decisión. Es el libre
albedrío.
O
sea, que, si seguimos enlazando, podemos decir que es su decisión no tener
pareja, ya que no se conoce, y como no se conoce no sabe lo que quiere y no
puede elegir.
Pero podría conocerse.
¿Tiene
algo que ver en la aceptación de su cuerpo? ¿Valorarse, respetarse?
Siempre.
Eso
es fundamental.
Ahí
está su conocimiento. Amarse a si misma, valorarse, respetarse, aceptarse. Pero
eso también tiene que ver con conocerse.
Muchas
veces los humanos transitan el camino sin conocerse, quejándose, quejándose
siempre, y nunca se dan cuenta de cuál es la fuente de la queja real.
Todos
quieren, quieren, quieren cosas, quieren amor, todos quieren, pero no miran
hacia dentro para ver que es lo que les falta, lo que les falta dentro, que es
lo que está funcionando mal para que no les llegue lo que creen que les falta
fuera.
A
“este lado” estamos dispuestos a darles todo lo que quieren, pero muchas veces,
lo tienen delante de sus ojos y no lo pueden ver. Y no lo pueden ver, porque no
se pueden ver a si mismos por dentro.
(Luz:
Aquí tuve la visión de una señorita caminando, mirando hacia abajo, y muchos
jóvenes guapos, quienes parecían tener un vínculo estrecho con ella, y ella ni
siquiera los notaba. La enseñanza de esto es que, si no puedes reconocer el
amor en ti, mucho menos podrás reconocerlo afuera).
¿Conocerse
a uno mismo lleva implícito saber que somos un alma y somos hijos de Dios?, o
¿nos estamos refiriendo a conocerse emocionalmente en la Tierra?
Conocerse en la Tierra.
El
conocimiento de lo que es en la Tierra ¿le puede llevar al conocimiento de que
es un alma?
Si.
Todo es un proceso, puede que sea en esta vida o puede que no. Primero tiene
que trabajar con sus emociones terrenales.
¿Podemos
incluir a Alessia en el libro con el título de conocerse a si mismo?
Si
¿Hay
algo más que podamos saber o nos ayude?
Ámense los unos a los otros como yo los
he amado.
Nuevo encuentro con el alma de
Alessia
¿Realmente
amas tu cuerpo?
Mi
cuerpo es una lucha constante. Siempre estoy tratando de cambiarlo, de
mejorarlo, pero es muy difícil. No puedo.
En
lugar de tratar de cambiar el cuerpo, ¿No sería más fácil aceptarlo?
No.
¿Podemos
hacer algo?
Me falta amor propio
¿Te
has rendido, has arrojado la toalla?
No.
Estoy buscando alternativas, pero ninguna me convence del todo
Te
falta la alternativa de amarte.
Estoy
buscando alternativas para que me enseñen ese camino. Pero cuando pienso en
terapia psicológica, no estoy preparada para eso.
Siento
cansancio, cuando pienso en esas cosas.
¿Por
qué has elegido este cuerpo?
Porque tengo que aprender a amarme
tal cual soy.
Pero
no lo estás haciendo.
Pero
estoy aceptando la posibilidad de una terapia para comenzar el camino.
Hay
algo que quieras decir para que te lo contemos aquí abajo en la Tierra.
Parezco una persona alegre, pero
estoy triste.
¿Alguna
cosa más?
No.
Gracias.
Queremos
hablar con su Maestro.
Acá está su Maestro
¿Sabemos
quién es?
Si. Soy Kuthumi.
¿Qué
se le puede decir a Alessia que sea como esa chispa que le haga amar su cuerpo
y aceptarlo?
Ella
es un alma hermosa, pero todavía no lo puede ver.
Su
alma, incluso está cansada.
En
la Tierra ella gasta mucha energía tratando de disimular quien es, porque ella
misma no se acepta, y entonces eso la desgasta mucho, y está en un círculo del
que la va a costar mucho salir.
Tiene
mucha tristeza dentro, le cuesta avanzar.
Independientemente
de que tenga que aprender a amarse y aceptarse, ¿cuál es su misión importante,
o su misión espiritual en esta vida?
Creo que todavía eso no lo pueden
saber.
¿Sería
bueno decirle esto que estamos hablando?
Me
está mostrando una y otra vez lo mismo, la tristeza que tiene ella en la que
está atrapada.
No
creo que pueda avanzar en nada si no saca esa tristeza.
¿Cómo
puede sacar esa tristeza?
El
problema es que ella misma se está engañando con una falsa alegría.
Tiene
miedo a la noche, tiene miedo porque es el momento en el que está sola, sin
ruido, sin gente, sin nadie a quien agradar, porque es el momento donde se
encuentra con ella misma.
Es
muy triste, pero, sin embargo, la ves y no parece triste. Se muestra alegre,
sin preocupación.
Necesita
un trabajo constante y profesional para que le puedan ayudar a elevar su
autoestima, para conocerse y ver la persona linda que es.
Una
vez que ella logre ver un poco de esto, sería interesante que ella comience a
hacer un trabajo espiritual, para terminar con la sanación.