¿Qué va a
decir la gente si sales a la calle con esa pinta?, ¡Ya sabes que tu padre
quiere que seas ingeniero!, ¡La pareja con la que sales no es la adecuada para ti
y no nos gusta!, ¡Qué vergüenza, un hijo mío separado! Puedes seguir añadiendo
frases que seguro te han dicho, o que tú has dicho, o que has escuchado en múltiples
ocasiones.
Vivir de la
opinión de los demás es una de las mayores causas de sufrimiento en los seres
humanos, porque por mucho que se haga por satisfacer al resto del mundo,
siempre va a haber alguien que no esté de acuerdo con tu conducta, con tus
pensamientos, con tus palabras, o con tu manera de respirar, es igual, lo
importante es opinar y criticar.
Y ¡Qué más
da! Que critiquen. Qué sabe nadie de tus razones, de tus emociones, de tus
sueños, de tus pensamientos, de tus creencias, de tus deseos, de tus anhelos
más íntimos, de tus frustraciones o de tus miedos.
Cada ser
humano tiene un camino que recorrer, el suyo propio, cada ser humano tiene que
vivir su propia vida, cada ser humano tiene que experimentar en carne propia,
cada ser humano tiene que adquirir el conocimiento que le corresponde para su
alma, cada ser humano ha de vivir su propia experiencia.
Lo que pueda
pensar o decir el resto del mundo no debería de ser más que una pequeña anécdota
que añadir en el margen de una página en el libro de la vida, una anécdota que
no puede, ni debe, interferir en la propia vida.
El mundo
está lleno de personas frustradas, tristes e infelices que lo único que
pretenden es conseguir que el resto del mundo sea tan infeliz y viva con tanta
tristeza y frustración como la suya. Su deporte: Juzgar, criticar, opinar: Yo
opino que…………, yo creo que lo que tendrías que hacer es…………., parece mentira
que fulanito haga…………, no tienes razón en nada de lo que dices……….., hay que
ver como viste………, no sé cómo no le da vergüenza………, lo mejor para ti sería………,
vaya amigo que se ha echado……….
¿Quién ha
dicho a nadie que su misión en esta vida sea ejercer de juez, ejercer de
crítico, o ejercer de comentarista de la vida del resto del mundo?, posiblemente nadie, y sin embargo, existen
muy pocas conversaciones en las que no se juzgue a alguien, o no se le
critique, o no se opine sobre lo que sería mejor para la vida de esa persona.
Los
pensamientos y las creencias de cada uno, ¿Por qué han de ser aplicables al
resto del mundo? Los pensamientos y las creencias de las personas no son más
que una manifestación de su nivel de evolución, no son más que una
manifestación de su carácter, no son más que una falta de respeto, y en ningún
caso sirven para ninguna otra persona, porque cada persona está en un nivel de
evolución determinado, cada persona vive una circunstancia específica en su
vida, distinta a cualquier otra.
Vivir pendiente
del exterior, vivir pendiente de los juicios y de las opiniones de los demás,
es poner la vida en sus manos, es entregarles el poder. Qué más da. Por mucho
que digan tú no vas a ser ni más alto, ni más bajo, ni más listo, ni más tonto,
ni más rico, ni más pobre.
Así que ante
la opinión de los demás puedes repetirles: ¡Y a mí que más me da!
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