El viaje del alma

El alma no tiene raza, no tiene religión, solo conoce el Amor y la Compasión.
Todos somos seres divinos, hace miles de años que lo sabemos, pero nos hemos olvidado y,
para volver a casa tenemos que recordar el camino. BRIAN WEISS




miércoles, 15 de abril de 2015

¿Qué me falta para ser feliz?


Perlas para el alma

Los seres humanos tratan de paliar sus carencias espirituales con posesiones materiales, y afanados recorren un camino inútil para llegar a ningún sitio, para no entender después, como no son felices, ¡si no les falta de nada!
            ¡Y tanto que les falta!, les falta todo, les falta lo más importante: el conocimiento de lo que son, les falta creer que se puede conseguir un cambio, les falta la voluntad para trabajar en la consecución de ese cambio y les falta la paciencia para esperar los primeros resultados.

martes, 14 de abril de 2015

Jueces de nada y parte de todo


 "Debes convertirte en el cambio que deseas ver en el mundo."
     Mahatma Gandhi

Queremos un mundo mejor, queremos ser felices, queremos vivir sin estrés, queremos ser amados, queremos sentir paz interior, queremos dejar de lado la ansiedad, el miedo o la soledad, solo por mencionar alguno de los grandes males con los que convive la raza humana, o alguno de lo que parecen logros imposibles de conseguir.
Una de las grandezas que tenemos los seres humanos reside en la capacidad de cambio y que no la tiene ningún otro animal sobre la Tierra. Aunque también es cierto que son muchos los seres humanos que desconocen esa capacidad y pueden pasarse toda su vida sin realizar la más mínima variación en sus estructuras mentales, y por lo tanto en las acciones que dirigen sus vidas.
            De la misma manera que se realizan cambios para conseguir algún objetivo material, se han de realizar cambios para la consecución de objetivos no tan materiales, y que bien podríamos denominar espirituales, ya que son los relacionados con el espíritu, los relacionados con el alma, pero que sin embargo, son los cambios imprescindibles para la consecución de todas esas cosas intangibles, que a fin de cuentas, son las que van a hacer que nuestra vida se mueva por encima de los umbrales de la infelicidad, infelicidad que soportan, con más o menos estoicismo e incluso con aceptación, la mayoría de personas.
            El desconocimiento de que las cuestiones relacionadas con el alma son las que nos van a dar la auténtica paz que todos deseamos, hace que tratemos de encontrar la paz, la felicidad, la armonía o el amor, transitando a través de caminos equivocados para llegar a ¿La meta?, ¿A qué meta?
            El mayor error consiste en creer que existe una meta y que para llegar a ella, existe un camino. Y este error es el que lleva a todos los seres humanos a tratar de paliar sus carencias espirituales con posesiones materiales, y afanados recorren un camino inútil para llegar a ningún sitio, para no entender después, como no son felices, ¡si no les falta de nada!
            ¡Y tanto que les falta!, les falta todo, les falta lo más importante: el conocimiento de lo que son, les falta creer se puede conseguir un cambio, les falta la voluntad para trabajar en la consecución de ese cambio y les falta la paciencia para esperar los primeros resultados.
Son seres espirituales, y como tal, solo van a conseguir la felicidad que tanto ansían cuando conecten con su espiritualidad, que es lo mismo que decir que cuando conecten con su alma, y como eso parece muy etéreo, se puede centrar más en que se conecten con los dictados de su corazón.
 
            Aquí deviene el cambio. ¡Dejar de pensar para empezar a sentir!, y esto es algo que solo reside en la grandeza del ser humano. Los animales que se rigen por los instintos, no necesitan ningún cambio porque lo único que necesitan es mantener la existencia, con escasísimas necesidades, alimentarse, reproducirse y descansar. Ya sé que hay seres humanos que se parecen muchísimo a los animales, con el agravante de que tienen una mente que les incita a robar, a violar, a engañar o a matar. Pero está claro que no es su momento de ir más allá, y que en su evolución, más que crecimiento, puede ser que ellos mismos se hayan ofrecido para el aprendizaje de otros seres humanos que necesitan para su aprendizaje ser engañados, ser violados, ser robados o morir de manera violenta.
            Está claro que este post no es para esos que están más cerca de la irracionalidad, sino para los que están buscando, aunque por caminos equivocados vivir la experiencia de ser un alma.
            Volvamos al cambio, y sobre todo recordar que si queremos obtener distintos resultados, algo hay que cambiar, ya que si siempre hacemos las mismas cosas, los resultados siempre serán los mismos. Por supuesto si lo que queremos obtener son resultados espirituales, los cambios, parece lógico pensar, que también han de ser espirituales.
            ¿Cuáles serían esos cambios espirituales?: Volver la vista al corazón, volver la vista a la comprensión, volver la vista a la tolerancia, volver la vista al respeto, volver la vista a la ayuda, volver la vista a la honradez, volver la vista a la misericordia. A partir de estos cambios de actitud, en los que al principio se ha mantener una total y absoluta atención, hasta que la mente se vaya acostumbrando a la nueva forma de hacer, algo a empieza a cambiar, en la persona y en el entorno. La persona empieza a sentir una alegría que no sentía con anterioridad, y empieza a ser consciente de una paz interior desconocida, descubre entonces, que “todo está bien”, que no ha venido a la Tierra para ser juez de nada, pero si parte de todo; y esta nueva forma de hacer comienza a ser percibida por la gente de su entorno, que posiblemente, al principio del cambio piensen que la persona está perdiendo la cabeza, pero no tardarán mucho en ser conscientes de que es un cambio y no una locura.
            A partir de ese momento, también comienza a cambiar el entorno. Si con anterioridad con frecuencia había enfrentamientos, enfados, malas caras, malos entendidos, gritos y silencios, a partir del cambio, a la sonrisa le responderá otra sonrisa, el abrazo y el respeto serán correspondidos, y la ayuda, la comprensión y la tolerancia agradecidas.
            Ya lo dicen los sabios: “Si quieres un mundo mejor conviértete en el cambio que deseas”, “Cambiando tú, cambia el mundo”, empezando por cambiar “tú mundo”.
            Así que este parece un buen momento para dejar de desear y actuar para que ese deseo se cumpla.

Yo Soy el alma


Perlas para el alma
 
La verdadera y futura curación se efectuará cuando la vida del alma pueda fluir sin impedimento ni obstáculo a través de cada aspecto de la materia, pudiendo entonces vitalizarla con su potencia y eliminar así los bloqueos que son la fuente de las enfermedades.
Un sinfín de enfermedades tienen su origen en un, “enfado del alma”.  Sólo hay que ser honestos con uno mismo, escuchar lo que dice el corazón, y seguirlo al pie de la letra.

viernes, 10 de abril de 2015

El gran día para los seres humanos


            El día en que los seres humanos seamos conscientes del poder creador de nuestros pensamientos podremos, oficialmente, dar por concluida la etapa de sufrimiento sobre la faz de la Tierra.
            El día en que los seres humanos dejemos de ser como una hoja movida por el viento, y tengamos la suficiente voluntad para pensar y actuar al unísono con el alma, se habrá acabado el ciclo de nacimientos y muertes.
            El día en que los seres humanos tengamos con todos nuestros semejantes la misma tolerancia, la misma paciencia y el mismo amor que tenemos con un bebé de meses se erradicará todo lo malo del mundo: guerras, asesinatos, robos, odios mentiras, traiciones, celos, …..
            El día en que los seres humanos den la espalda a las religiones, tan discriminatorias, tan intolerantes, tan hipócritas, y abran su corazón a Dios, sabremos realmente lo que es amar.
 
            El día en que los seres humanos seamos conscientes de que todos somos lo mismo, todos la misma energía, todos la misma divinidad, entenderemos al fin que “si tu ganas gano yo”, y “si tu pierdes pierdo yo”, con lo que el “leitmotiv” de todos y cada uno será ayudar a los demás.
            El día en que los seres humanos entendamos que ser Hijo de Dios significa que somos Su Creación, que somos Su Energía, que sería como decir que llevamos sus genes, trataremos al resto de Hijos de Dios como hermanos, porque es lo que somos.
            El día en que los seres humanos entendamos que el Universo nos devuelve ciento por uno aquello que pedimos, aquello que permanece con intensidad en nuestra mente, todos viviremos en la abundancia y en la opulencia divina.
            El día en que los seres humanos entendamos que a cada acción le corresponde una reacción y que cada causa produce un efecto, (Ley del Karma), se erradicará la maldad entre los hombres, recordar: “El que a hierro mata, a hierro muere”, “Cada uno va a recoger exactamente lo que siembra”.
            El día en que los seres humanos nos volvamos como niños, nuestro será el reino de Dios. Ya lo dijo Jesús: “Dejad a los niños, y no les impidáis que vengan a mí, porque de los que son como éstos es el reino de los cielos”.
            El día en que los seres humanos comprendamos, por fin, que aprendemos siguiendo el ejemplo, cambiarán los comportamientos para que nuestros hijos se eduquen en la bondad, en la tolerancia y en el amor.

jueves, 9 de abril de 2015

Algo le falta a Dios


            Parece que Dios lo tiene todo, tiene la sabiduría, tiene el amor, tiene la belleza, puede estar en todos los lugares a la vez, nada es imposible para Él, es todo bondad, tanta bondad, que nos permite vivir la vida que cada uno de los mortales nos hemos dado, sin inmiscuirse para nada en la vida de ninguno, sabiendo de antemano cual va a ser el resultado de todas y cada una de nuestras acciones.
Aunque parezca que lo tiene todo, no es tal, le faltan cosas, le falta todo lo que le tendríamos que dar todos los seres que estamos encarnados, le falta nuestro amor, cuando curiosamente, es lo único que hemos venido a hacer a la Tierra: aprender a amar, aprender a vivir la vida como cuando estamos al otro lado de ella, comportarnos como auténticos hijos de Dios. Los hay que incluso, no sólo no le aman, sino que le temen.
Iba a decir que tenemos que aprender a amar, y que al primero que deberíamos amar sería a Él, a Dios, pero no, no puede haber primero, porque cuando se ama como Dios nos ama a nosotros, que es como hemos de amar, no hay lugar, ni posiciones, ni cantidad, ni tiempo, ni ranking, se ama a todos por igual, incluso a Dios, y punto.
Cuando los seres humanos decimos, (porque es algo que casi todos tenemos claro), que somos hijos de Dios, no somos conscientes de lo que significa tal afirmación, y no lo somos porque no la hemos integrado en nosotros, y actuamos a espaldas de Dios, diciendo que somos sus hijos.
Aunque eso de que actuamos a espaldas de Dios es una manera de expresar que nuestras acciones no están en concordancia con nuestra ascendencia, la ascendencia divina, que es lo que significa ser hijos de Dios. Dios lo sabe, lo sabe tan bien, que ya hace miles de años nos dio unos mandamientos para cumplir a lo largo y ancho de nuestra vida, que podían servir como guía para evitar las payasadas que vamos realizando en cada una de nuestras vidas. 
No sabemos amar, aunque también es cierto que nadie nos lo ha enseñado. Y, sin embargo, son muchas las oportunidades que tenemos en cada vida física para aprender. Solo tendríamos que expandir el amor que sentimos por nuestros hijos, por nuestros padres o por nuestra pareja hacia el resto del mundo, o al menos, al resto de nuestro mundo, compañeros y amigos, para poder, a través de ese amor llegar a amar a Dios y al resto de seres humanos. Es cierto que el amor que sentimos hacia los nuestros, no es el amor que estamos buscando, nuestro amor es un sentimiento, y el auténtico, el verdadero y el incondicional es una energía. Pero por algún sitio tenemos que empezar.
Dios es hoy, para casi todas las personas, un desconocido, o alguien que nos castiga si no cumplimos ciertos preceptos, o una especie de conseguidor al que acudimos cuando nos acucian los problemas, del tipo que sean. No nos acordamos de Él para nada más que para pedir. Y ¿Por qué de la misma manera que pedimos, no agradecemos?, ya que no le amamos, al menos, seamos agradecidos, o ¿Se supone que lo que consideramos bueno lo conseguimos nosotros y lo que creemos malo nos lo envía Dios?
Dios nos ama de tal manera, que no le importa que no le agradezcamos nada, no le importa que no le amemos, ni tal siquiera llega a notar tal carencia, ya que Él, mejor que nadie, sabe que dentro de cuatro días, para nosotros, para Él un suspiro, estaremos de vuelta en casa.

sábado, 4 de abril de 2015

Que canten los niños


 El yoga es la práctica de silenciar la mente.
 Patanjali.
El yoga no trata de tocarse los pies,
trata de lo que aprendes en el camino.

Jigar Gor.

Las dos piezas más importantes de equipamiento
que necesitas para hacer yoga son tu cuerpo y tu mente.

Rodney Yee   

Un elevado porcentaje de personas se inician en la práctica del yoga buscando eliminar el estrés. Prácticamente nadie indica otra razón distinta, como podría ser expandir su conciencia, crecer espiritualmente, madurar su carácter, sentir más cerca a Dios, aprender a amar, o encontrar la armonía en su vida y en sus relaciones.
            Pero es normal que solamente hablen del estrés, de la flexibilidad y de la salud, porque eso es lo que se ve, y por lo tanto, es lo que existe para la inmensa mayoría de las personas. Los hay que incluso comentan: “Yo no puedo hacer yoga porque no soy flexoble”, y ¿Qué más da?, lo importante como dice Rodney Yee en la cita del principio es que se tengan las dos piezas básicas: El cuerpo y la mente, nadie dice cómo ha de ser ese cuerpo y esa mente.
No pueden hablar de otra cosa, porque no la conocen, nadie les ha enseñado lo que significa ser un “ser humano”, lo que significa el alma, lo que significa Dios, el significado de la vida y la muerte, o lo que supone amar. Nadie les ha explicado su papel en la vida, nadie les ha contado que hacen antes de nacer o donde se encuentran, nadie les ha contado su conexión con el resto de seres humanos. En resumen, que sólo tienen un ligerísimo conocimiento de lo que supone ser “humano”, pero ninguno en absoluto de lo que suponer ser un “ser”.
            Y mejor es que sigan, por el momento, en su ignorancia, ya que todo lo que sobrepasa lo que parece ser la razón les asusta, y mejor es que practiquen para conseguir eliminar el estrés, que lo demás ya llegará por añadidura.
            Ya es una buena señal que se asomen al yoga y a la meditación, ya que si son constantes, conseguirán paulatinamente ir eliminando el estrés, que es lo que buscan, pero a la par comenzarán a ser conscientes de “algo más”, de ese algo que lleva aparejado el yoga, que no es otra cosa que una nueva filosofía de vida, ya que el yoga no es una técnica para tranquilizar emocionalmente a las personas, que si lo hace, sino que es una filosofía de vida, es vivir desde una nueva perspectiva, la perspectiva de ser un “ser espiritual”, la perspectiva de acercarse a Dios, al amor y al resto de seres humanos que como él transitan por la vida.
            Ya es representativo el que una persona comience a bucear en otras posibilidades, como pueden ser el yoga y la meditación, la solución de sus problemas sin recurrir a fármacos. Es posible que la persona, no sea consciente del paso que está dando, sin embargo, es una señal evidente, de que su alma ha tomado las riendas de su vida, por un momento, para indicarla una nueva ruta, la ruta que de seguirla, la va a llevar a recorrer un camino corto, pero difícil por desconocido, que es el camino que va desde su mente hasta su corazón.
 
            Leía, justamente esta mañana, en uno de tantos post que aparecen en las redes sociales “El impacto de la meditación en el aprendizaje”.
            Transcribo literalmente: “Normalmente queremos cambiar las conductas cuando lo que se debe cambiar son los pensamientos. De acuerdo a investigaciones, más de la mitad de los niños agresivos se transforman en jóvenes crueles y violentos. Mark Greenberg, (psicólogo evolutivo y clínico) establece que entre los tres y los siete años empiezan a desarrollarse habilidades sociales muy importantes como: autocontrol, capacidad de detenerse, capacidad de calmarse, capacidad de mantener la atención. Por otra parte, los niños que poseen una buena capacidad de planificación y que son conscientes de sus emociones, al ingresar a la escuela corren menos riesgos de experimentar posteriormente trastornos de agresividad y de ansiedad”.
            Está bien que los mayores comiencen a hacer yoga y meditar para solucionar sus problemas de estrés, pero aun estaría mejor si lleváramos a nuestros hijos a las escuelas de yoga, no solo para que no se vuelvan estresados como sus padres, sino para que aprendan a dominar sus pensamientos, para que con los pensamientos dominados, puedan dominar su vida, para que esta, sea una vida feliz.

domingo, 29 de marzo de 2015

Enfados del alma


Perlas para el alma
 

La verdadera y futura curación se efectuará cuando la vida del alma pueda fluir sin impedimento ni obstáculo a través de cada aspecto de la materia, pudiendo entonces vitalizarla con su potencia y eliminar así los bloqueos que son la fuente de las enfermedades.
Un sinfín de enfermedades tienen su origen en un, “enfado del alma”.  Sólo hay que ser honestos con uno mismo, escuchar lo que dice el corazón, y seguirlo al pie de la letra.

viernes, 27 de marzo de 2015

Preguntas


Perlas para el alma
 
En nuestra civilización, con nuestra mentalidad y con nuestra manera de vivir, la muerte es inaceptable, vivimos y nos comportamos como si fuéramos a vivir para siempre. Pero no es así, la muerte llega en cualquier circunstancia, con cualquier edad, en un instante.
            La vida….., es esto. Nadie nos prepara para morir, pero es normal, porque ni tan siquiera nos preparan para vivir, y solamente podemos prepararnos tanto para la vida como para la muerte, si somos lo suficientemente curiosos para hacernos a nosotros mismos algunas preguntas, cuyas respuestas nos van a llevar a entender lo que es la vida y también lo que es la muerte.

Meditación para sentirte radiante y tener una mente clara


Meditación para sentirte radiante y tener una mente clara (Kundalini-Yoga)
Esta meditación fue enseñada por Yogui Bhajan el 15 de Octubre de 1979 en Española.
Postura
·         Siéntate en postura fácil con la columna recta.
·         Levanta los brazos doblándolos por el codo, y lleva las manos a la altura de la barbilla.
·         Coloca los dedos en Gyan Mudra, con las palmas mirando hacia delante.
·         Los ojos abiertos una décima parte.
Mantra
SAT NARAYAN WAHE GURU
HARI NARAYAN SAT NAM
·         SAT NARAYAN  es el “Verdadero Sostenedor”
·         WAHE GURU es “Sabiduría Indescriptible”
·         HARI NARAYAN es “Sostenedor Creativo”
·         SAT NAM es “Verdadera Identidad”
·         Cantar este mantra da paz interior, felicidad y buena fortuna.
·         Las palabras invocan los diferentes nombres de Dios para ayudar a traer prosperidad, paz mental y capacidad para ver más allá de este mundo, para comprender el Infinito.
Beneficios
·         Hasta las personas con una baja autoestima, desmoralizadas, y creyendo que no son nadie, y no tienen nada, pueden llegar a sentirse radiantes.
·         Esta meditación ayuda a pensar con claridad.
Tiempo
·         Intenta hacerla un mínimo de 11 minutos.
·         Puedes llegar hasta 31 minutos.
 

Sólo importa la vida


            Vivir significa disfrutar de cada momento de la existencia,
 tengamos diez años u ochenta.
Og Mandino

            No importa quién eres al otro lado de la vida, no importa quién hayas sido en vidas anteriores, ni importa que no tengas conocimiento de cuál es tu misión, ni tan siquiera cuanta es la cantidad de Karma pendiente.
Lo único importante es tu vida actual. Todo lo que tengas que aprender, todo lo que tengas que enseñar, todo lo que tengas que pagar y todo lo que tengas que cobrar, lo has de hacer en esta vida, con este cuerpo y con las circunstancias que te has dado.
Todo lo demás no es importante, ni poco ni mucho. Todo el trabajo es aquí y ahora.
Aprende a respetar a la familia, a los amigos, a los enemigos, a los desconocidos, aprende a compartir con quien no tenga, aprende a ayudar a quien lo necesite, en definitiva, aprende a amar a todos, sin distinción, y nada más importa.
Si te queda Karma pendiente, ya lo programarás para liberarte de él en próximas vidas, en esta, no vas a poder hacer nada con él, así que no te preocupes, porque mientras distraes tu atención por ese Karma en el que no puedes actuar, estás dejando de prestar atención al Karma que te has traído a esta vida, en el que si puedes actuar.
 
Si en otras vidas has sido rey o mendigo, héroe o asesino, tampoco importa, lo que importa es lo que eres, porque es con esta personalidad que te has dado con la que vas a realizar tu aprendizaje para esta vida.
Tenemos, todos, verdadera locura por conocer cosas que nada importan para nuestro crecimiento. Mientras pensamos que es lo que hemos venido a aprender, no lo estamos aprendiendo, porque lo único que estamos haciendo es darle pábulo a la mente, solo es una argucia más que nos presenta la mente para no perder su poder, la diferencia con otras mentes más mundanas es que le da vueltas a temas que nos apasionan, como las vidas pasadas, el espacio entre vidas, nuestra misión y nuestro futuro. Es decir, una forma de volver al pasado o de viajar al futuro envuelto en papel de regalo y con un lazo de colores.
No hay diferencia entre esos pensamientos y los pensamientos de riqueza, de pobreza, de enfermedad o de cualquier otro tipo. Estos, y los otros, sólo son pensamientos, y hay que erradicarlos, hay que dominar a la mente, en definitiva hay que meditar.
La no consecución de los deseos, ya sean materiales, emocionales o espirituales, generan ansiedad y nos alejan de la paz que necesitamos para estar abiertos al libre fluir de la vida, para poder así ser conscientes de las oportunidades que pasan delante nuestro, que son muchas y se presentan de manera permanente para poder cumplir nuestra auténtica misión.
No nos ceguemos con el brillo de lo que hemos sido, porque la ceguera nos a impedir ver quiénes somos realmente; no le demos vueltas a las cosas que hemos de hacer, porque las vueltas no nos van a permitir hacer lo que hemos de hacer. Aceptemos y disfrutemos la vida, porque es la mejor que podemos tener, y además no tenemos otra. 

jueves, 26 de marzo de 2015

Reflexiones sobre la muerte


            Esta semana está siendo especialmente trágica: Han muerto las ciento cincuenta personas que viajaban en el avión siniestrado en los Alpes franceses, han muerto otras treinta y ocho personas más en el choque múltiple en Huarmey (Perú), en el que además hay ochenta y cuatro heridos; y otros ocho muertos, siete desaparecidos y veinticinco heridos en el huaico, (desprendimiento o alud de piedras y lodo), de Chosica, también en Perú, y es posible que algunas desgracias colectivas más, de las que no llegamos a tener conocimiento.
            El sentimiento general ante catástrofes de estas magnitudes es de consternación, de dolor contenido e incluso puede ser de indignación, según las circunstancias. Todos colocándonos, en primer término, en el lugar de los accidentados, pensando en los momentos anteriores al siniestro, como les debió de ocurrir a los pasajeros del avión, que durante ocho minutos descendía y descendía hacia una muerte segura, dramático el dolor, dramática la impotencia, dramática la desesperación, dramático el terror; y en segundo término, colocándonos en el lugar de los familiares y amigos de los accidentados, incrédulos, sacudidos de manera brutal en su estructura humana, con un dolor infinito, desgarrador y puede que, en un primer momento, algunos, con una pizca de esperanza porque, a lo mejor, su familiar se había salvado.
 
            En nuestra civilización, con nuestra mentalidad y con nuestra manera de vivir, la muerte es inaceptable, vivimos y nos comportamos como si fuéramos a vivir siempre. Nadie, que no esté gravemente enfermo o lo suficiente mayor como para creer que ya tiene suficiente número de años, piensa que va a morir. Pero la muerte llega en cualquier circunstancia, con cualquier edad, en un instante, y la muerte, que es tremenda en cualquier circunstancia, acaecida en accidentes como los ocurridos en la presente semana, es trágica, es aterradora, es inaceptable, no sólo porque sea en grupo, sino porque en esos grupos hay bebés, hay adolescentes, hay jóvenes y personas sanas, que ni tan siquiera pensaban  en que había llegado su momento.
            Pero la vida….., es esto. Nadie nos prepara para morir, es normal, porque ni tan siquiera nos preparan para vivir, y solamente podemos prepararnos tanto para la vida como para la muerte, si somos lo suficientemente curiosos para hacernos a nosotros mismos algunas preguntas, cuyas respuestas nos van a llevar a entender lo que es la vida y también lo que es la muerte.
            Creo que todos los que nos asomamos a esta ventana tenemos, más o menos claro, que somos un espíritu, que somos eternos, es decir, que vivimos desde siempre y vamos a vivir para siempre, sólo que con una forma distinta a la que tenemos en lo que denominamos vida. El problema está en que este es un conocimiento racional, para nada integrado en el ser, y podemos hablar y hablar de que somos un alma, de que somos eternos, pero en el momento en que la muerte llama a nuestra puerta, no pensamos ni actuamos desde este conocimiento, sino que actuamos desde la racionalidad de que vamos a vivir en el cuerpo para siempre, y que los accidentes y la muerte es algo que no va con nosotros, que siempre ocurre a otros.
            Lo que nosotros llamamos vida bien podíamos calificarla como muerte, ya que, en la inmensa mayoría de los casos, mientras dura la vida en el cuerpo, nos olvidamos de lo que realmente somos, estamos en una especie de sueño, del que despertamos, en un instante, cuando acaece la muerte del cuerpo.
            Todos, por experiencias propias o por experiencias contadas por clarividentes, por clariaudientes o por psíquicos, tenemos conocimiento de que ya, en el mismo funeral, el muerto se está paseando entre la gente, sonriente y feliz, despidiéndose de sus familiares y amigos, intentando que alguien diga a sus familiares lo bien que se encuentra.
            El drama no es para el que se va, una vez abandonado el cuerpo, el drama es para el que se queda, que no puede abrazar más al ser querido, que no puede tener su compañía, que jamás va a volver a verle. El drama es porque se va alguien a quien se ama. Pero esto no es más que otro error, y sucede porque no solo no nos han enseñado a vivir ni a morir, sino que tampoco nos han enseñado a amar.
            Amar, seguro que todos lo habéis leído o escuchado cientos de veces, es algo que se da a cambio de nada, como también habréis escuchado que en el amor, en el auténtico amor, lo único importante es la felicidad del ser amado. ¿Por qué entonces el dolor?, ¿Por qué el sufrimiento?, si realmente supiéramos amar, estaríamos felices porque el ser que se ha ido de nuestro lado, al otro lado de la vida, está en casa, está feliz, está sin dolor, está despierto, está vivo, y además se ha ido porque así estaba programado.  Estas deberían de ser suficientes razones para que el dolor, o no fuera tal, o fuera más liviano.
            De cualquier forma, como aunque tengamos el conocimiento, no está integrado, solo nos queda, cuando la desgracia llame a nuestra puerta, pedir ayuda a la Divinidad para que nuestro dolor se atenúe, y cuando la desgracia llame a otras puertas, como en esta ocasión, acompañar, ayudar y orar.

              

lunes, 23 de marzo de 2015

Comprar la vida


Perlas para el alma

 
“Para mí la meditación es algo más que un pasatiempo. Es algo así como un refugio donde olvido el pasado y principalmente el futuro, teniendo en cuenta además, que algunos creen que no tengo futuro por estar enferma, aunque la verdad es que nadie tiene futuro, sanos o enfermos, porque nadie tiene comprada la vida”.

Del Diario de Patricia (11)

sábado, 21 de marzo de 2015

Adios Cusco - (Para Alfonso de Patricia. Para todos de Alfonso)


Nuestra etapa en Cusco ha finalizado. Han sido años intensos, en los que hemos conocido a personas increibles, de los que siempre guardaremos un grato recuerdo.
Gracias, gracias a todos, gracias por vuestra amistad, gracias por vuestra comprensión, gracias por vuestro apoyo.
Entre esas personas hay una especial: Patricia. A modo de despedida transcribo la suya.
Para Alfonso:
No sé si volveré a verte, porque además cuando finalizamos la terapia me encontré en mi camino con una gripe muy fuerte, con muchas flemas y mucha fiebre. En fin, ya pasó.
El motivo de esta nota es porque quería decirte lo mucho que valoro tu trabajo, y como tardaríamos mucho si te lo digo hablando, por lo de mi lengua de trapo, te lo digo escribiendo.
Quería decirte que eres un buen ser humano, y que nunca cambies, porque lo que necesita el mundo es gente como tú y como Elisenda. Si en el mundo hubiera más personas como vosotros el planeta sería otra cosa.
Muchas, muchísimas gracias por tanta paciencia, y sobre todo por ser esa fuente de amor incondicional. Permanecerá en mi memoria esa sonrisa, esa calidez y toda la buena onda que trasmites.
Comprendo que así es la vida, conoces a alguien, disfrutas de su compañía y en otro momento lo tienes que dejar partir a recorrer su propio camino, y todo debe fluir, porque así es la vida, pero es mucho más fácil escribirlo  que sentirlo.
Y por favor, nunca sientas que no has hecho nada por mí. “Me has curado el alma”, me has dado tanta paz y tanta fuerza, que afrontar este reto que es mi vida es mucho más fácil. En verdad has hecho mucho por mí, lo valoro inmensamente. ¡Bendito seas allá donde Dios te lleve!, siempre voy a ser tu paciente del alma.
Patricia Flores Núñez
 
De Alfonso para Patricia
En el continuo de la vida llegó el momento de cerrar una etapa, llegó el momento de abrir la puerta a una nueva experiencia, a una nueva vida. Primero fue de España a Cusco, ahora de Cusco a Lima, mañana……, ¡Dios dirá!
Pero ni la ilusión del cambio, ni la alegría de la nueva experiencia pueden impedir que vayan pasando por mi corazón todos los momentos vividos en Cusco, todas las personas, y sobre todo todas las terapias contigo, vernos dos veces a la semana durante muchos meses, crean un vínculo especial. Nuestras conversaciones, a pesar de “tu lengua de trapo”, permanecerán en mi recuerdo.
Ahora mis ojos están brillantes, quieren salir las lagrimas, ¡soy un llorón!, pero no es por tristeza, ni por añoranza, es por amor; el mismo que estoy poniendo en cada letra para que cuando leas esto, puedas sentir, aunque sólo sea un instante, el amor que ahora vive en mí.
Ya estás en mi corazón y en mi alma, pero también estarás siempre en mi pensamiento, en mis oraciones y en mi meditación.
¡Bendita seas!, ¡Cuídate!, ¡Te quiero!
 
Escuchar la canción, es el mismo video que puse cuando me despedía de mi país de nacimiento.
 

El diario de Patricia (11 y punto y seguido)


Época de tristeza
La tristeza no es que sea necesaria, pero es parte de la experiencia humana, ya que  si todo fuera alegría seria un poco hasta aburrido. Para saber lo que es la alegría debemos saber lo que es tristeza, sino conociéramos las dos, no sabríamos diferenciarlas. No es que sea necesaria, pero está ahí, está y está bien. No creo que en esta vida terrenal sea posible ser feliz de manera permanente. Sólo se de un lugar donde se puede ser feliz todo el día, y digo todo el día para expresarlo de alguna manera, ya que allí no existe ni el tiempo ni espacio. Ese lugar es nuestra casa, nuestra verdadera casa, allí, con Diosito, nuestro autentico Padre, quien nunca nos falla porque nos ama, y nos ama mas en las épocas de tristeza aunque nosotros no podamos sentirlo así.
En verdad la cosa más triste que me paso fue la muerte de mi abuelita materna. Una señora que crio a sus siete hijos, y lo hizo sola porque quedo viuda muy pronto, y sacó a todos sus hijos adelante, todos profesionales. No entiendo la razón de tanto dolor por mi parte. Estaba viejita y era lo que tocaba, supongo que sería porque nunca había sentido la muerte tan cerca de casa, y además tampoco pude despedirme, ya que murió en Puno en casa de un tío. La última vez que la vi fue cuando se fue precisamente a Puno.
Lo único que me alegra es que nunca me vio así, con el cuerpo enfermo, ya que ella hubiera sufrido mucho porque me quería mucho, era su nieta favorita. Espero que mis primos no lean esto.
Después de eso entré en depresión, aunque no tanto por la muerte de la  abuelita. La verdad es que me sentía muy débil física y emocionalmente, en todo sentido tan vulnerable con hipocondriaca.
Digo lo de hipocondriaca porque me puse a recordar de manera obsesiva los ataques epilépticos que tenía una compañera de colegio exactamente en tercero de secundaria. En ese momento yo juraría que me había contagiado. ¡Qué pensamientos tan absurdos!.
La muchacha de los ataques tenía un cuadro muy triste: daba un grito y se caía empezando las convulsiones, perdía el conocimiento y al despertar no recordaba nada.
No sé porque tenía tan loca idea, y esto se unido a los ataques de pánico de los que ya hable antes en la universidad, me hacían temblar de manera descontrolada. He notado que cuando me emociono, ya sea por alegría, miedo, pena o euforia, tiemblo un poco mas y últimamente, cuando estoy distraída o muy concentrada en cualquier cosa, no tiemblo nada, parece que toda la atención se va a otro lado.
Ahora entiendo que esas ideas negativas como las del contagio y las otras contribuyeron, o mejor dicho fueron la raíz de mi enfermedad. Así que de una forma u otra soy responsable de este cuadro clínico.
Los pensamientos tienen poder y más si los usas negativamente. Está comprobado científicamente que las personas con una actitud positiva superan más rápido los males, por eso siempre trato de mantenerme feliz, y eso que hay días en que es más difícil la sonrisa, pero hay que seguir siempre adelante. Me viene ahora a la cabeza la frase de una película: “Retroceder nunca, rendirse jamás”. 
Cómo conectarse con Dios
Esto no es algo que haya inventado, ya existe desde la antigüedad. Es algo que puede parecer muy fácil, pero no lo es, sobre todo en los inicios, y se requiere práctica constante. Estoy escribiendo sobre la meditación: Meditando aquietamos la mente, aunque solo sea unos minutos. No me refiero a aquietar la mente como organizadora, planificadora o para resolver problemas, no, me estoy refiriendo a esa vocecita parlanchina que habla en tu cabeza y para el colmo, la muy cotorra, lo ve todo de color gris. Esa voz que te dice: “Mira aquella joven es más bonita que tu” si eres mujer, y si eres varón dice: “Ese tipo es mas musculoso que tú” y así te arrastra a tener, generalmente, pensamientos inútiles que nos separan de nuestra verdadera naturaleza divina.
Para poder tener un momento de paz en esa avalancha de pensamientos, en el momento libre que tengas, siéntate en una silla si puedes, si tu físico te lo permite, sin apoyar la espalda en el respaldo del asiento. Al comienzo puedes concentrarte en tu respiración cerrando los ojos, trata de olvidarte quien eres actualmente, tu nombre, tu edad, bórralo todo, tu no eres nada ni nadie, para ti para el mundo no tienes pasado ni futuro, con practica y constancia lo lograrás, solo existe ese instante siéntete vivo con cada inhalación y cada exhalación.
Estoy olvidando algo muy importante antes de comenzar a meditar debemos invocar a Dios para que nos ayude en la meditación. Los que no creen en Dios o lo prefieran llamar Jehová, Yhave, o la fuerza que mueve al mundo.
También podemos pedir la protección de los arcángeles, angeles o maestros ascendidos, según nuestras creencias o simplemente a quien para nosotros represente a Dios.
            Esto es recomendado hacerlo cada día unos cinco minutos por lo menos, muy pronto te acostumbraras, y además es muy divertido tratar de domar a la mente aunque sea por un minuto.
Se estarán imaginando que soy una experta en la meditación, pero no es así, aunque espero llegar algún día. ¡Con práctica todo es posible!
La meditación según Osho es una dimensión totalmente diferente tu simplemente observas la mente al observarla sales de ella al salir ya no hay más problemas ni sufrimientos.
Para mí la meditación es algo más que un pasatiempo. Es algo así como un refugio donde olvido el pasado y principalmente el futuro, teniendo en cuenta además, que algunos creen que no tengo futuro por estar enferma, aunque la verdad es que nadie tiene futuro, sanos o enfermos, porque nadie tiene comprada la vida.
Otra cosa muy distinta es que tengamos planes de futuro, proyectos reales e irreales, pero otra cosa es lo que Dios tiene preparado para nosotros. No sé si llamarlo destino, pero hace más de diez años tenía planes, sueños, y todo se fue, y lo mejor es que hoy siento que no perdí nada realmente importante, excepto la salud física, porque nada es más valioso que la salud. 
Antes creía que tenía mala suerte por haber enfermado ahora entiendo que mi vida es un reto.
Gracias a los que habéis leído mi perorata. He desnudado mi alma y he compartido mis penas y mis alegrías con vosotros. Espero que hayáis disfrutado y si leyéndolo habéis comprendido a alguna otra persona que tengáis cerca, ¡Bendiciones para todos!