El viaje del alma

El alma no tiene raza, no tiene religión, solo conoce el Amor y la Compasión.
Todos somos seres divinos, hace miles de años que lo sabemos, pero nos hemos olvidado y,
para volver a casa tenemos que recordar el camino. BRIAN WEISS




jueves, 27 de octubre de 2022

No hay fracaso en la pareja

              


                 Aconsejo a los religiosos, creyentes, devotos, seguidores y practicantes de todas las religiones, así como a todos aquellos influenciados por las insanas creencias de la sociedad, a los meapilas, a los hipócritas y a los fariseos, que no sigan leyendo, ya que no es una lectura que les pueda interesar porque va claramente en contra de sus intereses. Este es un escrito para afianzar el respeto y no creo que, ningún adalid de la pureza que viva blandiendo su espada de fuego en contra de los que consideran que viven en pecado, conozcan mucho de él.

              Así que, ahora que ya hemos quedado solo los pecadores, podemos comenzar. No existe fracaso en el matrimonio o en la pareja, ya que el fracaso es la no consecución del éxito y, en la pareja, teniendo en cuenta que ni los mismos integrantes conocen la razón de su unión, no se puede hablar de fracaso. Se puede, sin embargo, hablar de éxito en todas las uniones, aunque, la mayoría de las veces sea un éxito agridulce o, incluso, amargo, por el desconocimiento del ego sobre cuál es la causa y los objetivos de la unión.

              Para entender el párrafo anterior sería bueno remontarnos al espacio entre vidas, anterior a la encarnación en la que se produce la unión de la pareja. Si, ya sé que no podemos remontarnos a algo que no conocemos, pero sí tenemos alguna pista de cómo se organiza una vida. En ese espacio, antes de encarnar en la materia, cada alma organiza su vida y firma su contrato. Ya sabemos que elegimos los padres, el lugar de nacimiento, así como las relaciones y el trabajo a realizar. También se organiza y se firma las uniones de las personas, así como los objetivos a alcanzar en ellas.

              Cada unión tiene por objetivo el aprendizaje, la cancelación de deudas kármicas, la recepción de débitos, y la enseñanza. El alma, aunque el ego tenga un total desconocimiento de la tarea a realizar, sigue las pautas establecidas para que la unión se de y el trabajo se realice.

              Por lo tanto, las uniones pueden durar un instante, un tiempo más o menos largo o toda una vida. El problema surge cuando la unión no debe durar más allá de un tiempo limitado y choca frontalmente con las creencias religiosas o con las creencias de la sociedad, que impone que una unión debe durar toda una vida.

              Existe un problema añadido, posiblemente, el más importante, y es que las uniones no se establecen desde el Amor del alma, desde el Amor divino, desde el Amor incondicional. Las uniones se establecen desde lo que podríamos llamar amor humano, que no es más que una emoción, una mezcla de amor-deseo, en el que priman múltiples factores, totalmente alejados de la energía del Amor. Esos factores pueden ser la atracción física, el deseo sexual o intereses materiales, como pueden ser: alcanzar una buena posición social, una mejora en la economía, la necesidad de compañía o satisfacer a la sociedad para evitar “el qué dirán”.

              Y aún podríamos hablar de otro problema más, como es la falsa creencia de bastantes hombres de que en la unión la mujer tiene un papel de servilismo y la falsa creencia de las mujeres de que, efectivamente, es así y que han de intentar satisfacer al hombre en todo lo que se supone que a este le agrada. Esto es dramático, esos hombres, de hombre, solo tienen el nombre, y las mujeres con esa creencia, son una clara muestra de que no se respetan a sí mismas. Es lógico y normal que no reciban el respeto que merecen como seres humanos.

              Hagamos un inciso, para recordar que todos, hombres y mujeres, somos exactamente iguales. Todos somos alma, todos somos una Chispa Divina, todos somos hijos de Dios, que un día decidimos encarnar, por propia decisión y, en esa encarnación le pusimos al alma, para facilitar el trabajo a realizar, un ropaje de hombre o de mujer. La realidad es que somos eternos y que no tenemos sexo. Líbrese bien el miembro de la pareja que maltrate física o emocionalmente a su pareja, porque en próximas encarnaciones es posible que tenga el sexo contrario a la encarnación actual para recibir en carne propia el daño generado.

              Con todo ese panorama, se establece la unión para realizar el trabajo acordado, que se puede realizar o no. Pero ante la falta de autentico Amor, ninguno de los miembros de la pareja va a ser capaz de identificar cuando ha finalizado ni el trabajo ni la unión. A partir de ahí surgen los engaños, los sufrimientos, los desencuentros, los maltratos y mil y una desgracia más.

              Con lo fácil que es identificar cuando ha finalizado la unión, y de manera racional, basándose en el Amor, el cariño, la generosidad y el respeto, concluir esa unión, que no la relación, apoyándose ambos en los primeros momentos, esos que la sociedad se encarga de calificar como dramáticos, cuando, sin embargo, ha sido una relación exitosa, porque no solamente han cumplido su compromiso, sino porque han podido extraer el aprendizaje y abstraerse de la conciencia social.

              Cuando el hombre entienda que no solo no es superior, sino que posiblemente camine varias pasos detrás de las mujeres, y cuando la mujer aprenda a respetarse a sí misma y entienda que su sumisión a la tiranía es el aprendizaje que está dando a sus hijos, que serán tiranos, y a sus hijas que serán esclavas, se habrá acabado la lacra de maltratos y engaños en la pareja, aunque no basen su relación en el Amor, pero si lo hagan en el respeto mutuo.

                

Cusco: La ciudad imperial

 

 Martes 25 de octubre 2022

 De pronto, un día le puse una respuesta a la pregunta ¿y si me voy al Perú? La respuesta fue: “Si, me voy a vivir al Perú” y, entonces surgió una nueva pregunta: pero ¿a qué lugar? Y para responder la segunda pregunta analicé las ciudades del sur del Perú que podían estar influenciadas por la nueva energía de la kundalini y, en este caso, no tuve muchas dudas: Cusco. Bueno, para mí, en aquel entonces era Cuzco. La “z” se cambió por la “s” cuando comencé mi andadura en la ciudad imperial.

A pesar de que el inca, que trastocaba mi meditación, era el responsable de mi “loca decisión”, no lo tuve en cuenta cuando me senté a meditar al día siguiente. Y allí estaba. Apareció nada más sentarme y, cosa extraña en él, permanecía en silencio, supongo que observando cómo me encontraba después de una decisión tan importante. No fue hasta el final de mi meditación cuando pude escuchar en el centro de mi cabeza: “Bienvenido a casa”.

Nunca más ha vuelto a aparecer.

Y, por eso estoy en Perú. ¡Que loco!

El avión con destino a Cusco ya estaba en el aire. En una hora llegaría a la que sería mi nueva casa.

miércoles, 26 de octubre de 2022

Una nueva etapa laboral

 


Capítulo XIII. Parte 3. Novela "Ocurrió en Lima"

-    Antay, -escuchamos al señor Ramírez- ya está todo listo. Bienvenido a la empresa. Si le parece, pase a mi despacho y le explico todo lo que necesita saber y las dudas que pueda tener.

-    Si, vamos. Gracias, -y a la asistente del señor Moretti- Gracias señora Claudia por enseñarme la oficina.

El señor Ramírez me explicó cómo funcionaba la empresa y contestó a todas mis preguntas. Para finalizar me entregó una identificación, un celular de la empresa, las claves para acceder a las aplicaciones, mi dirección de e-mail y la llave de la entrada, que según dijo tenían todos los directores.

-    Puede comenzar mañana mismo. Si piensa salir a visitar oficinas, que no sea el lunes porque a las 10 tenemos reunión de dirección. Ha sido convocada por el señor Moretti para presentarle a usted, explicar a los demás directores cuáles serán sus funciones y para que usted nos conozca a todos. Las reuniones y cualquier otra información corporativa se avisan por e-mail.

>> Me dijo el señor Moretti que usted mismo se encargará de su personal. Según los vaya reclutando que vengan con su curriculum a recursos humanos. Les haremos una entrevista. Serán, si no estoy equivocado, un asistente, dos técnicos y cuatro administrativos, ¿es correcto?

-    Si, así es. Si le parece yo mismo les iré acompañando.

-    Me parece perfecto. Pues nuevamente le doy la bienvenida. Ha entrado en una muy buena empresa. Hasta mañana. Como tenemos las oficinas contiguas nos veremos con frecuencia. ¡Ah!, una cosa más, si necesita una computadora hasta que empiecen a retirar las sobrantes de las oficinas le puedo prestar una.

-    No gracias, traeré la mía. ¿Podría quedarme ya a trabajar y ver algunas cosas en mi despacho?, ¡para qué voy a esperar a mañana si no tengo otra cosa que hacer!

-    Por supuesto. Desde este momento puede entrar y salir cuando quiera. Eso sí, su asistente siempre tiene que saber dónde está por si se le necesita para algo.

Pasé a mi despacho para comprobar la información que aparecía en las carpetas. Era completísima. Después supe que cada movimiento se registra y se envía copia a todas las direcciones para que mantengan la información actualizada. Supuse que esta información también aparecería en alguna de las aplicaciones de la empresa, ya que si no era así sería uno de nuestros primeros trabajos extraordinarios a realizar. Si se estaba creando un departamento informático, se supone que todo debería estar informatizado.

Estuve el resto de la mañana revisando información y programando el orden en que visitaría las oficinas. El viernes quería visitar la que parecía más importante y que se encontraba muy cerca de la oficina principal, para preparar desde allí, la operativa, contando con la información, de primera mano, que me pudieran facilitar. Quería, además, comenzar a retirar computadoras, cuando fui consciente de que no podía hacerlo hasta que no estuviera operativo mi personal.

Tenía que acelerar todo el proceso y no esperar dos meses para tener clara la operativa de trabajo. 

-    Antes de marchar, cerca de las tres de la tarde, pasé por el despacho del señor Ramírez. El señor Moretti me dijo que tenía dos meses para preparar la operativa y comenzar a trabajar, pero quiero hacerlo ya, comenzando de manera paulatina, oficina por oficina. Es posible que la operativa de trabajo yo la voy a tener mañana mismo que voy a visitar la oficina “Uno de San Isidro”. Pero para eso necesitaré personal trabajando. ¿Podría comenzar alguno?, por ejemplo, mi asistente y un técnico o administrativo.

-    Por supuesto que sí. Es usted el único responsable de su departamento. Lo que haga estará bien hecho, mientras no se demuestre lo contrario, ¡claro!

-    Gracias. ¡Hasta mañana!

martes, 25 de octubre de 2022

En la muerte, todos iguales

         


          Imagina que te proponen una vida sin enfermedad, sin dolor, sin hambre, sin sed, sin cansancio, sin tener que trabajar, sin hipotecas, sin necesidades de ningún tipo, incluido de dinero, sin sufrimiento, con una inmensa sensación de felicidad y amor permanente, pudiendo conversar con tus antepasados y con tus contemporáneos, con la posibilidad de desplazarte únicamente con el pensamiento, y un sinfín de facilidades más. ¿No firmarías de inmediato?

Claro que a todo esto habría que añadir que sin cuerpo. No sé si con esta nueva condición seguirías firmando.

Efectivamente, ese estado tan fantástico es el estado de vida fuera del cuerpo, es ese estado al que, muy posiblemente, temen llegar casi todos los seres humanos, porque es el estado al que llegamos después de la muerte del cuerpo.

¿Por qué el miedo?, ¿no son suficientes los motivos del primer párrafo para desear ese estado?

Es, perfectamente, comprensible el miedo en los seguidores de casi todas las religiones, ya que auguran a sus socios las mayores desgracias después de la muerte, si no han seguido los preceptos que ellos enseñan, pero no deberían de sentir miedo el resto de mortales. Además, la vida en el cuerpo es nada más que un ratito comparado con el tiempo, eterno, que pasamos al otro lado.

Nosotros no somos estos cuerpos que parecemos, los cuerpos son sólo trajes que usamos por un tiempo y luego desechamos. Somos almas inmortales. La perfección de Dios es también en nosotros, pues vivimos, nos movemos y tenemos nuestro ser en Él. Pero somos inconscientes de nuestra Naturaleza Divina, y así seguiremos hasta que no despertemos a ella y, eso, normalmente, no va a pasar hasta que dejemos el cuerpo.

Cuando dejamos el cuerpo, todos somos iguales, los políticos, los ladrones, los asesinos, los embaucadores, el santo y el demonio, todos, porque todos vivimos en el Padre, y todos sentimos el mismo amor, la misma alegría y la misma felicidad, con independencia de lo que hayamos hecho en nuestro ratito de vida en el cuerpo.

Ya volveremos otros ratitos, a la vida del cuerpo, para ir arreglando lo que estropeamos con anterioridad, ya que el mal que hicimos con anterioridad debe ser equilibrado con el bien. Este proceso de siembra y cosecha se llama Karma. Es la ley del reajuste, que el ser humano pone en funcionamiento con cada uno de sus pensamientos, con cada palabra y con cada acción.

Hay algo que casi nadie discute, aunque, para muchos, no sea más que una palabra no integrada en su vida, somos un alma, y todas las almas somos iguales. A pesar de las diferencias de nacimiento, diferencias de raza, credo, sexo o color, de bondad o maldad, todos los seres formamos una fraternidad indivisible. Todos nosotros, altos o bajos, sabios o ignorantes, lo somos durante ese ratito que dura la vida en la materia.

Nacemos y morimos una y otra vez, con el único objetivo de aprender a vivir desde nuestra divinidad. Las distintas vidas solo son un aprendizaje, en las que vamos pasando en cada una de ellas por el parvulario, la primaria, la secundaria y la universidad, en donde por medio del trabajo y el aprendizaje, lentamente vamos desarrollando nuestras facultades. No es posible vivir la Naturaleza Divina, en nosotros, con las experiencias de una sola vida. Por eso reencarnamos una y otra vez. Entramos en la vida, nacemos, crecemos, actuamos, terminamos nuestro trabajo y retornamos. Nuestro retorno es muerte. Y en nuestro retorno, todos, volvemos a las mismas condiciones.

Si fuéramos conscientes de esto, el mundo sería otra cosa, sería más equitativo, sería un mundo en el que todos tendríamos las mismas oportunidades de acceso a las riquezas del planeta, a la educación, a la sanidad. Un mundo en el que todos sentiríamos alegría por ver la felicidad de otro ser humano, un mundo en el que sentiríamos a nuestro prójimo como nuestro hermano.

Sería un mundo lleno de Amor.

 

Serpiente de Luz

  


Martes 18 de octubre 2022

 Volví a releer el capítulo del libro en el que Drunvalo relataba la llegada de la kundalini a su nueva residencia. Busque en el mapa para tratar de ubicarla y entonces fui consciente de que en una canalización que hice, de manera accidental, unos años atrás, el canalizador me dijo que viajaría a Perú. Para ser sincero no le hice ningún caso y ni tan siquiera recuerdo para qué tenía que viajar a Perú y sé que lo dijo.

Y ahí estaba yo, con el inca machacándome en cada meditación, con la información del libro “Serpiente de Luz”, el mapa de Sudamérica extendido delante de mí y el recuerdo de la canalización. Era como un puzle en el que tenía que armar una imagen creíble sin tener ningún modelo que me sirviera de guía.

El pensamiento de acercarme a algún lugar que estuviera bajo la influencia de la energía kundalini de la Tierra parece que iba ganando fuerza. Hasta que, en un momento, sin saber cómo, apareció la pregunta en mi cerebro, ¿y si me voy a Perú?

Antay conoce la empresa



Capítulo XIII. Parte 2. Novela "Ocurrió en Lima" 

La oficina de recursos humanos se encontraba en la planta superior, justo al lado del espacio que ocuparían las nuevas oficinas de informática.

El señor Ramírez era un señor bajito, regordete y calvo. Un espléndido bigote adornaba su cara en la que destacaba, además del bigote, unos grandes ojos negros que parecían escudriñar todo. Era un hombre, que debía rondar la sesentena, afable, educado, respetuoso y servicial.

Durante dos horas permanecí con el señor Ramírez repasando el contrato y completándolo con la información de mis datos personales. Allí me enteré cual sería mi sueldo, ¡cinco veces mayor que el que tenía en mi antiguo trabajo!

Mientras el señor Ramírez bajaba al despacho del señor Moretti para que este firmara el contrato, pasé al que sería mi despacho. Había una antesala en la que se ubicaría mi asistente. Estaba claro que nadie iba a pasar a mi despacho sin que antes la persona que estuviera en dicha antesala le diera su visto bueno. Una vez pasado ese filtro se llegaba al que iba a ser mi despacho. Era una sala de unos 15 metros cuadrados con un gran ventanal que daba a la calle. Delante del ventanal se encontraba la mesa, un sillón, que parecía muy cómodo, y una estantería repleta de carpetas, todas iguales, rotuladas en el canto con el nombre de cada una de las oficinas que la empresa tenía repartidas por todo el país. No faltaba ningún detalle, teléfono, lápices, hojas de papel, en fin, todo lo que se puede necesitar en una oficina, excepto computadora.

-    Las computadoras, tanto la suya como la de todo su departamento, serán las que ustedes vayan retirando de las oficinas, -era la voz de Claudia, la asistente del señor Moretti- que entraba en ese momento en la sala.

>> Saliendo de su despacho a la derecha están las oficinas que ocupará su personal, vamos a verlas, si le parece.

-    Sí, vayamos, gracias, -y salí tras ella para terminar que conocer el espacio que ocuparían las personas de mi nuevo departamento.

 El espacio parecía muy acogedor. Equipado con mamparas de un metro de altura, podían trabajar, de manera cómoda, 15 personas.

En la misma planta se encontraba una sala de juntas con capacidad para 20 personas, baños separados, de hombres y mujeres, y una sala de descanso equipada con una especie de cocina en la que había un microondas, una cafetera y una maquina dispensadora de agua fría, natural y caliente.

-    Cuando el señor Moretti encargó el microondas, -comentó Claudia- todos pensamos que era un gasto inútil y, sin embargo, es una de las piezas que más se utiliza. Nos viene muy bien para calentar la comida los días que estamos agobiados de trabajo y no nos da ni tiempo de salir a comer o para los que prefieren calentar la comida que traen de casa en lugar de comer en cualquier cafetín.

sábado, 22 de octubre de 2022

Yo deseo.....

  


Lunes 17 de octubre 2022

 

Para entender un pensamiento tan loco es bueno saber cuáles eran mis más íntimas aspiraciones. Esas con las que soñaba, sobre todo, despierto en mis sueños solitarios. Aunque, como todos los seres humanos, deseaba tener más dinero, vivir en una mansión, poder viajar por el mundo cuando me apeteciera y, algún capricho más que mi insaciable deseo se encargaba de ir presentando, no pasaban de ser pensamientos, tan fugaces, como esas estrellas que, algunas veces, adornan el firmamento, porque mi auténtico sueño, mi más íntimo deseo, “a pesar de ser un hombre”, siempre, ha sido alcanzar la “iluminación”, si es que eso existe, llegar a la Luz, poder hablar con los seres del “otro lado” de la vida, desarrollar la bondad y el amor en su total plenitud y, teniendo en cuenta que soy sanador, también soñaba con tocar a las personas y saber si iban a sanar o no y saber qué es lo que tenían que hacer para que tal cosa sucediera. En realidad, podría resumir tal cúmulo de necedades en dos palabras “crecer espiritualmente”, ya que eso es lo que yo más deseaba.

Ahora que releo el párrafo anterior me doy cuenta de que soy un “babau”, en toda la extensión de la palabra. Pero voy a dejar el párrafo tal cual está, porque realmente esos son mis sueños. Si, ya sé, además de babau soy un iluso.

Decía que “a pesar de ser hombre”, porque, por norma general, los hombres estamos tan ocupados en demostrar nuestra hombría que no tenemos tiempo que perder en estupideces, como la evolución, el crecimiento personal o la espiritualidad.

Yo he sido uno de esos hombres durante una buena temporada de mi vida. Afortunadamente, en el último tercio de mi vida, algo ha cambiado. Supongo que, para bien, porque me siento en paz, sin estrés, sin tener que estar demostrando mi hombría o mi valía a cada instante. Hago lo que me apetece, siempre dentro de un orden, porque trato de satisfacer, a mi esposa y a mi hijo, aunque no siempre lo consiga.

Esto de no conseguirlo a veces, es, para mí, una prueba inequívoca de que todavía me falta un buen trecho en mi camino hacia esa Luz a la que aspiro.

Pero siguiendo el hilo de lo que son mis sueños, que hoy once años después permanecen intactos, me hice un planteamiento siguiendo el pensamiento aparecido con la lectura del libro: Si realmente me están esperando en algún sitio y si lo que yo quiero es progresar espiritualmente, ¿qué pasaría si me fuera a vivir a algún lugar influenciado por la kundalini de la Tierra?, es posible que fuera más fácil ese crecimiento.

El pensamiento estaba ahí, pero sin mucha fuerza, debido, sin duda, a que era la primera vez que aparecía. Seguí meditando con el inca, porque seguía apareciendo en cada meditación. 

jueves, 20 de octubre de 2022

SHIVALINGA- Mudra para reponer fuerzas

 SHIVALINGA- Mudra para reponer fuerzas



Cómo se hace:

La mano derecha, con los dedos doblados hacia el centro de la palma y el pulgar extendido hacia arriba, descansa sobre la palma de la mano izquierda que adopta la forma de un cuenco. Los dedos de la mano izquierda están juntos.

Las manos están situadas a la altura del abdomen y los codos se abren hacia los lados y hacia delante.

Sirve para:

Se moviliza la energía.

Contra el cansancio, la insatisfacción, el abatimiento, las depresiones o para aliviar el agotamiento tras haber tenido que soportar una elevada tensión.

Ayuda a que prosperen los procesos de curación, sin que importe el estado ni el tipo de enfermedad.

Es muy útil en épocas frías, ya que afloja la mucosidad que se ha acumulado en los pulmones, ayuda a expulsar flemas y alivia la tos.

Duración:

2 veces al día durante 4 minutos o, según se necesite, tantas veces como se quiera, hasta que logres deshacerte de esas sensaciones que disminuyen tu energía.

 

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El nuevo trabajo

   



Capítulo XIII. Parte 1. Novela "Ocurrió en Lima"

       - ¿Qué ha decidido Antay? –me preguntó el señor Moretti, mientras se adelantaba hacia mí extendiendo su mano para estrechar la mía, en cuanto entré en su despacho.

-    Aceptar la oferta. Será un placer trabajar para usted, -dije mientras nos estrechábamos las manos.

-    No va a trabajar para mí, -me rectifico el señor Moretti- va a trabajar para mi empresa.

-    Pues será un placer de igual manera, -contesté.

-    Me he adelantado, dando por supuesto su respuesta positiva, y ya tenemos preparado su contrato. Solo falta añadir sus datos personales y podemos firmar hoy mismo. Mañana puede comenzar a trabajar.

-    Gracias, -contesté- pero quiero que sepa que no ha sido una decisión fácil.

-    ¿Qué me dice?, ¿cuáles han sido sus dudas? –preguntó sorprendido el señor Moretti.

-    Más que dudas ha sido miedo. El primer pensamiento, cuando me ofreció el trabajo, fue tener miedo a no dar la talla, a no responder a las expectativas que, se supone, espera de mi trabajo, -me sentí bien contando mis temores.

-    Antay, es bueno ser responsable, pero un exceso de responsabilidad, que puede llevar al miedo, ya no lo es, -y continuó- su valía está más que demostrada por su trayectoria laboral y, con esto que acaba de decir me reafirmo en el concepto que me formé sobre su seriedad y responsabilidad. ¿Se han disipado sus dudas y desaparecido sus miedos?

-    Por completo señor.

-    ¿Sabe?, el martes por la noche me llamó mi hija para interesarse por su visita a la oficina. ¡No sabía que se conocieran!, y cuando le expliqué mi plan y mi ofrecimiento se pasó media hora alabándole y diciéndome que había tomado una decisión acertada. Parece ser que le ha causado una gratísima impresión.

Me hubiera gustado que se abriera la tierra y me tragara porque sentí como iban subiendo los colores a mi rostro y, no podía disimular escondiendo mi cara, así que allí estaba yo, rojo como un pimiento frente al señor Moretti que esbozó una ligera sonrisa y comentó:

-    ¡Vaya! Ya veo que la grata impresión ha sido por parte de ambos, -y cerrando el tema con mucha delicadeza dijo- Indhira es una gran chica. Vamos a ver al señor Ramírez, nuestro director de recursos humanos.

La Kundalini en Sudamérica

  




Domingo 16 de octubre 2022

 

Después del tercer día ya pensaba, alguna vez, en el inca, durante el resto del día. Pero el pensamiento asociado que tenía cuando la historia volvía a mi mente era: “pues si me están esperando que me digan adonde y se dejen de misterios. No es más que una tontería de mi mente. Con unos días de descanso todo volverá a la normalidad”. Fueron dos semanas en las que interrumpí mi rutina de la meditación, pero cuando volví a sentarme en mi cojín, no volvió la normalidad, porque allí estaba el inca, esperando impertérrito, que retomara mi rutina.

En esos días estaba leyendo el libro de Drunvalo Melchizedek, “Serpiente de Luz”.

En una parte del libro, Drunvalo relata como la energía kundalini de la Tierra, que tuvo su hogar, en un tiempo, en la antigua Lemuria, que más tarde pasó a la Atlántida y luego a los Himalayas, estaba en tránsito, con grandes dificultades hasta los Andes.

Leyendo sobre el nuevo hogar de la kundalini, que se ubica al norte de Chile, abarcando en su radio de acción al sur de Bolivia y al sur de Perú, un nuevo pensamiento apareció en mi cerebro: ¿Y si el lugar donde me están esperando fuera alguno relacionado con la kundalini de la Tierra?

miércoles, 19 de octubre de 2022

Te estamos esperando



Sábado 15 de octubre 2022

 Ya sé que estaba relatando la razón de mi viaje a Perú, pero me he levantado con uno de esos pensamientos clásicos, con los que se puede definir a un babau, y no quería dejar pasar la oportunidad de recogerlo.

Es un pensamiento que ya he tenido en otras ocasiones: Me preguntaba sobre la realidad de la vida y las cosas que la envuelven. En concreto, pensaba si todas las personas veremos lo mismo. Cuando yo veo un color, rojo, azul, negro, cualquier color, ¿todas las personas verán lo mismo que yo?, ¿con el mismo brillo?, ¿la misma tonalidad?, lo que yo llamo azul, ¿será azul para todos?

Cuando tengo estos pensamientos sigo con ellos, no hago nada para que desaparezcan. Me gusta esta filosofía barata. En fin, cosas de babau.

No creo que esto me pase, solamente, a mi. Seguro que hay otros babaus que piensan cosas parecidas, ¿o no?

  Mejor vuelvo al primer día de la primavera en el hemisferio norte del año 2010.

Pero ese día 22 de marzo sí que pasó algo. Se formó en mi mente una imagen y apareció un pensamiento asociado a ella. Me pareció que la imagen representaba a un indio de medio cuerpo. Pero no era uno de esos indios conocidos por las películas del Oeste, de las tribus apaches, sioux, cheroquis o cheyenes. No, era diferente. Entonces no supe ubicarlo. Hoy sé que no era un indio de alguna película, era un inca. Y asociado a la imagen un pensamiento: “te estamos esperando”.

Con la imagen y el pensamiento hice lo de siempre. Pensar que mi mente ya estaba jugándome, de nuevo, una broma pesada y, centré toda mi atención en la respiración y en las sensaciones de mi cuerpo, pero sin resultado. El inca seguía ahí.

Al final dejé la meditación. Siempre lo hago cuando no soy capaz de detener el pensamiento. ¡Mañana será otro día!, pensé.

Sin embargo, el inca apareció al día siguiente, con el mismo formato y el mismo pensamiento. Y al otro y al otro. Fueron cuatro días seguidos con la misma historia. Por lo que decidí descansar unos días de la meditación.

Cómo vivir desde el corazón (3 de 3)

         


       Como mantener una mente meditativa durante todo el día es una tarea harto difícil, mantén también la atención en todos los procesos de tu mente. Observa cómo se comporta tu mente, para dar prioridad a algunas de las energías del corazón: Intuición, desapego, compasión, ecuanimidad, amor.

La intuición es la voz del corazón. Es un murmullo constante. Sentirla es una señal clara de que la mente comienza a serenarse, ya que el ruido de la mente impide sentir cualquier otra cosa y aun menos un simple murmullo. Si llegas a sentirlo, hazle caso, no dejes que la mente analice ese murmullo, ya que sino, esta se encargará de desprestigiar a la intuición. Te va a decir que debes de seguir su lógica, ya que es la lógica lo que la sociedad espera que sigas. Sin embargo, la intuición es la voz del Yo Superior, es la voz del alma, y no hay nada más objetivo, ya que no está contaminada por las propias creencias, ni por los juicios que la sociedad está pronta a sentenciar.

Ecuanimidad es encarar la vida, con todas sus vicisitudes, en calma y con tranquilidad, sin perturbar la mente. Vivir desde el corazón es vivir la ecuanimidad, “todo está bien”. Para aprender a vivir desde el corazón se consciente de tus críticas. Desde una mente crítica es imposible vivir la ecuanimidad. Cuando entras en contacto con otras personas, has de tener muy claro que tus ideas, tus opiniones, tus creencias, no están en competencia con las ideas, opiniones y creencias de los otros, sino que todas tienen el mismo valor para Dios, se complementan, se enriquecen. En la ecuanimidad vas a entender y a respetar las creencias de los otros. Vas sencillamente a valorar, a apreciar y a respetar al otro.

Vivir desde el corazón, es vivir el desapego. El desapego no es un alejamiento frío, hostil. No es una manera robótica de ir por la vida, absortos y, totalmente, indiferentes a la gente y a los problemas. No es una actitud de inocente dicha infantil, ni un desentendimiento de lo que son nuestras verdaderas responsabilidades hacia nosotros mismos y hacia los demás, ni una ruptura en nuestras relaciones.

Desapegarse es liberarse o apartarse de una persona o de un problema con amor. Viviendo la propia vida al máximo de capacidad y luchando para discernir qué es lo que se puede cambiar y que no. Si no se puede solucionar un problema después de intentarlo, seriamente, hay que aprender a vivir con ese problema o a pesar de él. Y tratando de vivir felices, concentrándose en lo que de bueno tiene la vida hoy, y sintiendo agradecimiento por ello. Aprendiendo la mágica lección de sacarle el máximo provecho a lo que de bueno tiene la vida, ya que eso multiplica lo bueno en la vida.

El desapego implica "vivir el momento presente", vivir en el aquí y en el ahora. Permitiendo que en la vida las cosas se den por sí solas en lugar de forzarlas y tratar de controlarlas. Renunciando a los remordimientos del pasado y a los miedos por el futuro. Sacando el mayor provecho a cada día, aceptando la realidad, aceptando los hechos, aceptando y adentrándose en las experiencias. Requiere fe en uno mismo, en Dios, en otras personas, en el orden natural y en el destino de las cosas en este mundo.

Confía en que todo está bien a pesar de los conflictos. Confía en que Dios sabe más que tú. Él ha dispuesto lo que está sucediendo, y que puede hacer mucho más por resolver el problema que tú. De modo que trata de no estorbar en su camino y dejar que Él lo haga.

Las recompensas que brinda el desapego son muchas: serenidad, una profunda sensación de paz interior, la capacidad de dar y recibir amor de una manera que nos enaltece y nos llena de energía, y la libertad para encontrar soluciones reales a los problemas.

El corazón es compasión. Vivir la compasión es vivir la unidad. La alegría de otras gentes es la propia, el sufrimiento de otras gentes es el propio sufrimiento, la historia de otras gentes es la propia historia. La compasión acaba con la separación, liberando de la ilusión de la propia experiencia individual. 

Vivir la compasión es escuchar y comprender a otras personas, profundamente, lo cual ayuda a perdonar y a dejar atrás los juicios, ya que el juicio es un proceso de la mente, mientras que la comprensión lo es del corazón. Así que cuando estés con otras personas aprovecha la oportunidad para escuchar atentamente, para comprenderlas, sin juzgarlas. De esta manera te vas a convertir en el amor que buscas.

Y ama. Empieza por ti. Amaté, respétate, valórate, acéptate. Para aprender a amar utiliza la Regla de Oro: “Da a los demás lo que quieres para ti”. “No desees para los demás lo que no deseas para ti”.

Acuérdate de ser feliz.

martes, 18 de octubre de 2022

El valor de la amistad

 


Capítulo XII. Parte 6. Novela "Ocurrió en Lima"

El timbre de la puerta hizo que diera por finalizada mi meditación.

Diana, con cara de preocupación, estaba al otro lado de la puerta.

-    Solo entreabrir la puerta pude escuchar a Diana- estaba muy preocupada, porque antes vine y me extrañó mucho que no estuvieras en casa, cuando sabía que no tenías otra cosa que hacer.

-    Hola Diana, gracias por tu interés. Estaba en casa, pero sin mucho ánimo y me estaba recuperando con una meditación.

-     ¿Qué pasó?, ¿fue mal tu reunión de esta mañana?, -se interesó Diana.

-    No, al contrario. Me ofrecieron ser el director de un nuevo departamento de informática y me asusté. Pero ya estoy recuperado.

Le conté a Diana como fue mi entrevista con el señor Moretti. Cuando finalicé se quedó en silencio, durante un momento, como no entendiendo la razón de mi miedo.

-    Y ¿cuál es el problema?, ¿aspirabas a más? Pasar de no tener trabajo a encontrarte, de la noche a la mañana, con la dirección de un departamento, en una empresa importante, no parece que sea un castigo, ¿dónde está el problema, que no acierto a verlo?, -Diana se quedó callada, con los ojos como platos esperando mi respuesta.

-    Era miedo Diana.

-    Pero vamos a ver. ¿No eras el encargado en tu antiguo trabajo? Y, además, por lo que me has contado, prácticamente sin jefe. ¿Cómo vas a fracasar en algo que dominas a la perfección?

>>Antay, tú, que me has estado sermoneando, desde que te conozco, diciéndome que me centre en el presente, que deje de darle vueltas a una relación que ya no existe y que tampoco me recree en deseos de futuro, ahora, vas tú y ante una oportunidad única, que no es algo que se presente cada día, te asustas hasta el punto de pensar en declinar la oferta. No es normal Antay. Tienes que superar ese miedo y, tienes que hacerlo ya porque pasado mañana tienes que dar una respuesta y esa respuesta tiene que ser sí. Además, me interesa que aceptes. Yo quiero formar parte de ese nuevo equipo.

-    ¿Sí?, ¿vendrías a trabajar conmigo?

-    Con los ojos cerrados. Confío en ti mucho más que tú mismo. Y para el resto del equipo podrías contactar con tus antiguos compañeros. Seguro que más de uno está como tú, sin trabajo.

-    Tienes razón. Hoy es el primer día de mi nueva vida y, también, de la tuya. ¿Vamos a celebrarlo?

-    Vamos.

lunes, 17 de octubre de 2022

Meditación: Escudo para el corazón (Para cuando te sientas cansado/a)

 

Escudo para el corazón

 

La meditación "Escudo para el Corazón" sirve para fortalecer y proteger el corazón tanto física como emocionalmente. Realizarla cuando es fuerte el cansancio. Algunos de los propósitos y beneficios específicos de esta práctica incluyen:

1. Fortalecimiento del corazón físico: Esta meditación puede ayudar a fortalecer el músculo cardíaco y mejorar la circulación sanguínea alrededor del corazón, lo que puede contribuir a la salud cardiovascular en general.

2. Protección emocional: La práctica de esta meditación puede crear un "escudo" o capa de protección emocional alrededor del corazón, ayudando a mantener una sensación de calma y equilibrio incluso en situaciones estresantes o emocionalmente desafiantes.

3. Apertura del corazón: Aunque pueda parecer paradójico, el "escudo" creado por esta meditación no bloquea las emociones, sino que las filtra de manera que solo las energías positivas puedan entrar en el corazón. Esto puede ayudar a mantener el corazón abierto a la compasión, el amor propio y las conexiones significativas con los demás.

4. Equilibrio del chakra del corazón: El chakra del corazón, o Anahata, es el centro de amor, compasión y conexión. La meditación "Escudo para el Corazón" puede ayudar a equilibrar y armonizar este chakra, promoviendo una mayor armonía emocional y relaciones más saludables.

En resumen, la meditación "Escudo para el Corazón" ofrece una forma de fortalecer y proteger el corazón en todos los niveles: físico, emocional y energético. Esta práctica puede ser especialmente útil para aquellos que deseen cultivar un corazón abierto y resiliente en medio de las demandas de la vida moderna.




Mudra de las articulaciones

 Mudra de las articulaciones



Cómo se hace:

Mano derecha: Unir el pulgar y el anular.

Mano izquierda: Unir el pulgar y el dedo medio.

Duración:

4 veces al día durante 15 minutos o 6 veces al día durante 30 minutos si se está enfermo.

Beneficios:

Equilibra la energía de las articulaciones.

Alivia la artrosis.